Un grupo de alrededor de 40 personas, incluyendo familias afectadas y representantes de la asociación local LactaMater, asistieron a la presentación del Jardín de las Estrellas el sábado 11 de marzo. Este nuevo espacio de luto gestacional, perinatal y neonatal se encuentra en la ampliación del Cementerio de Viladecans y fue creado por el Ayuntamiento de Viladecans y la empresa Áltima. El objetivo del jardín es normalizar el proceso de luto que muchas familias experimentan tras perder a un hijo durante la gestación, parto o poco después del nacimiento. A pesar de ser un tema tabú en nuestra sociedad, este lugar memorial busca contribuir a su aceptación y reconocimiento.
La presentación del nuevo espacio contó con la presencia del alcalde Carles Ruiz; la segunda teniente de alcalde de Acción Comunitaria y Políticas de Igualdad, Gisela Navarro; la regidora de Juventud e igualdad de género y LGTBI+, Olga Reyes, y Joan Ventura, consejero delegado de Áltima, empresa concesionaria del cementerio local a través de GIC de Nomber.
Un lugar de acogida y consuelo, muy pedido por las familias
"¿Cómo recibir la muerte cuando se espera la vida? Esta es la gran pregunta, pero os avanzo que no he sabido encontrar cuál es la respuesta", señaló Anna Maria Orriols, miembro de Petits en Llum, en el nuevo espacio memorial del cementerio local. La iniciativa de hacer este espacio, a petición ciudadana, ya se ha hecho realidad en el acto de sábado.
Cada año en España fallecen más de 3.500 bebés en el último tramo del embarazo y otros 2.500 al poco de nacer, lo que afecta profundamente a las familias y se ha convertido en un tema tabú en la sociedad. Durante una intervención, la regidora de Igualdad, Olga Reyes, destacó la importancia de la iniciativa de LactaMater para honrar a los bebés fallecidos: "En este espacio vuestros hijos e hijas dejan de ser invisibles, a pesar de que sabemos que para vosotros nunca lo han sido, porque siempre están y estarán en vuestros corazones".
Después de la intervención de la regidora de Igualdad, la periodista Patrícia Aliu condujo el acto y compartió con las familias la lectura del poema "Un lloc per a tu". Este poema también está presente en la placa conmemorativa del Jardín de las Estrellas. El poema dice:
Tinc un lloc per a tu on ningú més no pot veure. Tinc aquest do que ningú no té, el vincle entre tu i jo. De vegades no et puc sentir aquí i aquest dolor no desapareixerà. Però quan busco el meu lloc estàs amb mi cada dia
Anna Maria Orriols, de la organización Petits en Llum, agradeció como madre en duelo la oportunidad de representar a las familias de Viladecans que también sufren la pérdida de uno o más hijos. Destacó que iniciativas como esta brindan un espacio para encontrar consuelo y validar el dolor. Además, enfatizó que estos espacios son necesarios para recordar a la sociedad que los bebés también pueden morir. Finalmente, citó al poeta Pablo Neruda: "Si nada nos salva de la muerte, al menos que el amor nos salve de la vida".
A continuación, Gema Santiago, miembro del grupo de maternidad en luto de LactaMater también quiso homenajear desde el atril todos los pequeños y pequeñas, y con mucha cuidado y ternura fue citando todos los nombres de las pequeñas estrellas que hoy conforman el nuevo Jardín.
El alcalde Carles Ruiz se unió a las familias y expresó su comprensión por lo difícil que es estar allí y compartir sus sentimientos con el mundo. Sin embargo, destacó la importancia de este espacio como una ayuda para compartir el dolor del luto. También agradeció a todas las personas que ayudaron a entender la necesidad de este espacio para las familias.
Después de una serie de aplausos y canciones, incluyendo "Et faig un lloc" del álbum solidario "Cançons per a una papallona", el sonido del violín de Laia Ferrer marcó el final del evento. Durante este acto, las familias pudieron despedirse escribiendo el nombre de su hijo o hija en estrellas de papel que luego se colgaron en uno de los grandes cipreses del jardín. Las familias también colocaron una rosa blanca al pie de la placa con el poema, haciendo que este espacio sea un recordatorio para todas las pequeñas estrellas que llegaron al cielo ese sábado.