El Aeropuerto de El Prat ha reanudado su vuelo directo a Shanghái, operado por Air China, tras la pausa por la pandemia. Esta ruta, junto a otras conexiones con Asia y Estados Unidos, es clave para el crecimiento internacional de empresas catalanas y el turismo en Barcelona.
Las rutas desde El Prat hasta el gigante asiático están renaciendo, de una en una: parece que la conexión entre Barcelona y Asia se ha recuperado del golpe de la pandemia. Este martes 27 de agosto, ha vuelto a surcar los cielos el vuelo directo a Shanghái desde el Aeropuerto de El Prat, operado por la aerolínea Air China. Tres veces a la semana (tanto en verano como en temporada baja) la ruta directa a Shanghái despegará desde El Prat; un avión con capacidad para más de 300 personas.
Esta ruta, inaugurada en 2017, se quedó en tierra con el estallido de la pandemia de 2019, y no ha vuelto a despegar hasta ahora. Esta nueva ruta se une a los vuelos a Pekín, Shenzhen y Hong Kong, que también se han vuelto a poner en marcha a lo largo de estos últimos meses.
Este martes, con motivo del primer despegue de esta nueva ruta, el Aeropuerto ha acogido un acto inaugural que ha reunido a los responsables de las entidades implicadas en este hito, tanto barcelonesas como chinas. Según ha contado Miquel Martí, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, El Prat ya ha recuperado prácticamente todas sus rutas intercontinentales (el próximo destino: Lima). Además de China, durante los últimos meses Barcelona ha reforzado y reanimado sus conexiones directas con varias ciudades de Estados Unidos, como San Francisco. Para el dirigente empresarial, este es “un hecho vital para promover el crecimiento internacional de las empresas catalanas”. Cuando el vuelo directo a Lima vuelva a resurgir, el Aeropuerto de El Prat habrá revitalizado todas las rutas de larga distancia que quedan por recuperar.
Los vuelos intercontinentales, una "vocación" del aeropuerto
El responsable de Turismo y Promoción Económica del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Valls, ha celebrado los “25 años de hermandad entre Barcelona y Shanghái” para defender la importancia de la recuperación de esta ruta. Según Valls, “a lo largo de los próximos dos años Barcelona reforzará su acuerdo de colaboración con Shanghái y China, poniendo especial atención a la cultura y la industria tecnológica”.
Según ha defendido Jordi Valls, en representación del gobierno liderado por Jaume Collboni, “nosotros tenemos claro que los vuelos intercontinentales son una vocación de Barcelona, y no solo para el ámbito turístico”. El Ayuntamiento de la capital barcelonesa defiende, pues, la ampliación del Aeropuerto de El Prat y el impulso de sus conexiones con el resto del mundo.
El turista chino que llega a España tiene una media de 37 años
Por su parte, el cónsul de China en Barcelona, Hu Aimin, ha aprovechado este acto de inauguración para reivindicar la “medida injusta” de la Unión Europea, que ha demandado la implementación de aranceles a los coches eléctricos procedentes de China. “Pido a España que vote en contra de la aplicación definitiva de esta medida el próximo noviembre”, ha implorado el diplomático.
Según los datos turísticos de Turespaña, el 62% de los viajeros chinos aterrizan a España motivados por las compras y las visitas culturales que ofrece el país. Además, la entidad ha descubierto también que el turista chino medio tiene unos 37 años, siete años menos que la media global de turistas internacionales, y que los viajeros chinos son, en su mayoría, de clase media y con estudios superiores.
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