Viladecans ha celebrado el nacimiento de 389 bebés en 2024 con la plantación de doce árboles de fuego illawarra. Familias se reunieron en el parque de la Marina para participar en esta tradición, decorando los árboles con nombres y disfrutando de una chocolatada. Este evento simboliza la bienvenida a los nuevos ciudadanos.
En 2024, Viladecans ha celebrado la nueva vida de 389 bebés: 160 niñas y 229 niños. Como ya es tradición, este domingo 9 de febrero, la ciudad ha plantado doce ejemplares de árbol de fuego illawarra (Brachychiton acerifolia) para dar la bienvenida a sus ciudadanos más jóvenes.
Este domingo, la ciudad ha invitado a todas las familias de los neonatos a reunirse en el parque de la Marina, a las 11h, para poner su granito de arena (o su semilla) en esta simbólica plantación. Después, como siempre, los asistentes han colgado hojas y flores de colores con el nombre de sus hijos en los árboles, que decorarán el parque durante todo el año. Además, las familias han podido disfrutar de la clásica chocolatada popular para cerrar la mañana con alegría.
La alcaldesa de Viladecans, Olga Morales, se ha encargado de presentar el evento y saludar a las familias. Junto a ella, también han asistido la teniente de alcaldía de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Encarni García; el teniente de Transición Ecológica y Movilidad, Jordi Mazón; la teniente de Derechos Civiles, Salud e Inclusión, Olga Reyes; y la regidora María Vicente.
Más de una decáda de tradición
La ciudad celebra este acto simbólico desde 2013 para demostrar que, aun con pocos meses de vida, estos bebés ya forman parte de la comunidad de Viladecans, que los recibe con las manos abiertas. Esta idea de una nueva vida con todo un futuro por delante se materializa en la plantación de un árbol por cada mes del año. Unos árboles que, como sus nuevos vecinos, también tienen sus raíces en Viladecans.