Una pelea de las muchas que se originan en el bar dominicano Luna Sky, ubicado en el número 18 de la Travessera de Les Corts, en el barrio de Collblanc (L’Hospitalet) ha ido subiendo de nivel hasta que se les ha ido a sus participantes de las manos. Bien entrada la madrugada de este domingo 9 de marzo, un hombre ha entrado en el conflictivo local (muy próximo a la plaza de la Solidaritat) empuñando un machete. Este sujeto, acompañado de otros cuatro secuaces (probablemente integrantes de una banda de origen dominicano) ha amenazado a dos de los clientes del bar de la misma nacionalidad, iniciando una multitudinaria riña que ha terminado con la mano amputada de unos de los agredidos enfriándose en una cubitera.
El sangriento enfrentamiento ha continuado fuera del bar, hasta que la primera patrulla de los Mossos d’Esquadra ha llegado a la puerta del local, solo unos minutos después, alertada por el tumulto que se había generado en la calle, en el límite mismo con el término municipal de Barcelona. Allí, en mitad del barullo, los agentes han encontrado a la víctima, herida de gravedad y con la mano completamente cortada. El agredido ha sido trasladado de urgencia en ambulancia al Hospital Clínic de Barcelona.
Confusión, huida y detenciones
Aprovechando la confusión y que los policias estaban ‘distraidos’ con la asistencia a la víctima, todos los demás implicados han salido huyendo de la escena de la pelea. Pero con escaso éxito. Inmediatamente, los agentes han desplegado una intensiva búsqueda tanto en el lado Barcelona de la calle, y sus aledaños, como en L'Hospitalet. Después de una batida por todo Collblanc y las barriadas colindantes, los agentes han dado con el paradero de tres de los cinco miembros de la banda implicada en la trifulca y también al compañero de la víctima, en posesión de una navaja.
Una vez han sido localizados y detenidos los cuatro tres individuos, los Mossos d'Esquadra han iniciado una investigación para esclarecer los hechos. Como se parte de la base de que los tres detenidos de la banda han entrado al local buscando pelea y armados, todo apunta a que la agresión responde a un "ajuste de cuentas" por algún tipo de enfrentamiento anterior (violento o no), según las primeras investigaciones, aunque esta hipótesis no ha sido aún del todo confirmada. No se descarta que se produzcan más detenciones.
La mano para proteger un machetazo
La víctima, un joven de origen dominicano, ha sido derivado de inmediato al Hospital Clínic en cuanto han llegado los Servicios de Emergencias Médicas (SEM) al lugar de los hechos. Seg´`un el parte, el joven presentaba heridas de gravedad, además de la mano amputada, que también han trasladado hasta el hospital, conservada en una cubitera para evitar su putrefacción y posibles infecciones. Una vez en el hospital, el joven ha necesitado una operación de urgencia, pero se está recuperando y su vida no corre peligro. Algunas fuentes consultadas apuntan a que la víctima habría perdido la mano intentando protegerse de un machetazo, que de haberle alcanzado en alguna zona vital podría haberle causado daños irreversibles.
No es el primer altercado (y, probablemente, tampoco el último) que comienza en un bar de esta zona de L'Hospitalet fronteriza con Barcelona y en la que reside una importante colonia latina. De hecho, hace apenas dos semanas, un enfrentamiento entre dos hombres, originado en el Disco-Bar Mami (en la confluencia de la barcelonesa calle de Sants y la fronteriza Riera Blanca, a unos 500 metros del Luna Sky), terminó con un disparo en la plaza Guernica de Collblanc y con la víctima trasladada de urgencia al hospital. El pistolero fue arrestado después de sufrir un accidente en la autovía de Castelldefels (C-31), a la altura de Gavà, mientras se daba a la fuga. La policia ha descartado que ambos sucesos estén relacionados.
Intensa campaña de vigilancia
Durante los últimos meses tanto la Guardia Urbana de L’Hospitalet como los Mossos d’Esquadra han aumentado el número de inspecciones a bares y locales nocturnos de la segunda ciudad de Cataluña. En principio, las visitas de los agentes solo pretenden constatar que los establecimientos cumplen con los permisos reglamentarios y las diferentes normativas, aunque las redadas casi siempre suelen ser una consecuencia de las recurrentes denuncias de los vecinos, que llaman a la policía para quejarse del ruido o la música de los establecimientos o del alboroto provocado en la vía pública por alguna pelea. El operativo también tiene como objeto reforzar la presencia policial y aumentar la seguridad en el vecindario.
Se da la circunstancia de que este mismo fin de semana, la Guardia Urbana de L'Hospitalet, con el apoyo de los los Mossos y la Policía Nacional, han realizado una redada en sendos locales conflictivos de la ciudad, uno en el barrio de Collblanc y el otro en La Florida, para "garantizar la seguridad y el cumplimiento de la normativa".
Dos actas sancionadoras y dos detenidos
En el primer establecimiento, el Pacha Bar de la calle Llobregat (Collblanc), se han realizado 15 identificaciones y se ha detenido a una persona. Además, se ha levantado un acta sancionadora porque el local estaba funcionando como bar musical sin tener la preceptiva licencia y también por realizar otras actividades no autorizadas. En el segundo bar, el Punta Dulce 2 de la calle Renclusa (La Florida), la policía ha identificado a 40 personas, una de las cuales ha sido detenida porque pesaba sobre ella un requerimiento judicial. Además, los agentes han levantado un acta sancionadora debido a que el controlador de acceso no disponía de la pertinente habilitación y porque se han detectado deficiencias en la cartelería.
También este lunes 10 de marzo, se ha informado desde el Ayuntamiento de L’Hospitalet de que el conflictivo Bar Josué (ubicado en el número 55 de la Rambla Catalana, en La Torrassa, ha sido cerrado durante cuatro meses (desde este pasado sábado 8 de marzo al próximo 7 de julio de 2025) debido a que, entre el 1 de septiembre de 2024 y el pasado 3 de marzo, la Guardia Urbana de la ciudad ha recibido múltiples quejas vecinales por ruidos e incumplimientos horarios del local.
Multa de 5.500 euros
Tras varias actuaciones in situ, que han incluido inspecciones policiales, controles, notificaciones y sus consiguientes informes detallados, se ha concluido un expediente sancionador ordinario que además ha comportado al Bar Josué una sanción económica de 5.500 euros. Además, se ha prohibido el traspaso de la licencia del local durante el tiempo en el que esté sancionado y mientras no se solventan las excesivas emisiones de ruido detectadas.
Si (
No(
