A un año de las próximas elecciones municipales, apostamos por la transparencia de las cuentas públicas en un esfuerzo por facilitar los datos que sustenten la opinión ciudadana. Cada mes, hasta los comicios, se publicará un amplio análisis de los números económicos de un ayuntamiento de algún municipio de la comarca. Tras el análisis del Ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat, nos vamos a un municipio de menos de 6.000 habitantes: Torrelles de Llobregat
Tras el municipio de Sant Boi, en esta serie de dossiers sobre transparencia de las cuentas públicas, hemos optado por analizar las cuentas de Torrelles de Llobregat, un pequeño municipio de 5.500 habitantes famoso por sus cerezas y por albergar el parque temático Catalunya en Miniatura. El paralelismo con la Cataluña gigante Gulliver no se escapa y bien pudiera servir de metáfora de lo que ha sucedido en el resto del país: aumento de impuestos y recorte de servicios prestados a consecuencia de la crisis (el estallido de la burbuja inmobiliaria) y de una herencia de deudas recibida del anterior gobierno tripartito. En Torrelles también.
El volumen total de ingresos obtenidos por el ayuntamiento de Torrelles de Llobregat ascendió en 2012 a 5.542.817 euros, mientras que el total de gastos realizados ese mismo año fue de 5.004.260 euros. Esto significa que el ayuntamiento cerró el ejercicio del año 2012 con un superávit de 538.557 euros, el mejor dato obtenido en los tres últimos años, según la información contenida en el documento “Liquidación de Presupuestos de Entidades Locales”, realizado por el Ministerio de Hacienda. En 2010 y 2011 el déficit alcanzó los 373.148 euros. ¿Cómo ha podido producirse un cambio tan brusco de un año para otro?
Miquel Yuste (PiP), tercer teniente de Alcalde del área de Gobernación y Hacienda, afirma que se ha producido un cambio de tendencia desde que entró el nuevo equipo de gobierno local en junio de 2011. Yuste explica que en los 8 anteriores años, gracias al boom inmobiliario, “los presupuestos eran más elevados gracias al impuesto de construcciones”. Entre las dificultades que su equipo ha encontrado, destaca que “en el 2011 nos topamos con gran cantidad de facturas por valor de 300.000 euros bajo el cajón y que no constaban en ninguna parte, además de que los gastos eran mayores que los ingresos en el presupuesto anual”.
Gracias a una serie de medidas de ahorro y también a la subida de impuestos, el ayuntamiento ha equilibrado las cuentas y, según comenta Yuste, es debido a que “todos nos hemos metido en la cabeza que tenemos que ahorrar, e incluso en fiestas gastamos actualmente 15.000 euros frente a los 80.000 de los buenos tiempos”. No obstante, el responsable de Hacienda asegura que “nos está costando mucho el equilibrio, porque aunque tengamos ingresos y vayamos bien respecto a la tesorería, el Ministerio nos ha cerrado las partidas y no podemos aumentarlas”. De esta forma el superávit que han conseguido en 2012 en Torrelles deberá ser invertido en reducir la deuda existente. Sólo así, dice Yuste, “el Ministerio podrá afirmar que la deuda de las administraciones públicas ha bajado, de forma que ellos no tendrán que hacer nada, y los ayuntamientos sí”.
Condena a los recortes
Juan Carlos Martínez, miembro de la oposición de Torrelles (PSC), condena los recortes y propone medidas para impulsar el crecimiento económico y empresarial en el municipio. En su opinión, se necesita “promoción económica del municipio, intentar que entren ingresos porque si no, no saldremos adelante. Estamos pidiendo políticas para ayudar a aquellos emprendedores que quieren establecerse en nuestro municipio”, afirma Martínez. En definitiva, pide “sembrar para después recoger” en una decidida apuesta por “la apertura de Torrellas hacia la comarca y hacia la provincia”.
Los impuestos directos crecen un 13,50%
Si nos fijamos en los ingresos por impuestos directos, es decir, los ingresos recurrentes de la actividad normal del ayuntamiento, han crecido durante los tres años analizados, tanto en valores absolutos como per cápita. Desde 2010 hasta 2012, los habitantes del municipio de Torrelles han pagado casi 300.000 euros más, que supone un aumento de 46,6 euros per cápita. Estos impuestos son todos aquellos derivados de la fiscalidad que grava directamente las propiedades físicas de los ciudadanos: Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), Rústica, Impuesto de Vehículos, Impuesto de Actividades Económicas (IAE) de grandes empresas, impuestos sobre plusvalías, etcétera. El ayuntamiento de Torrelles recaudó en 2012 un total de 2.136.457 euros procedentes de esos impuestos directos cuando en 2010 la cifra era de 1.836.502 euros.
Yuste justifica esta subida de impuestos en que “desde el Ministerio se impusieron ciertas medidas de ahorro, entre las cuales se encontraba la subida lineal a todos los pueblos sobre la base del 10% en el IBI. Nosotros subimos un 3,5% el IPC pero nos encontramos la subida impuesta por el Ministerio a mitad de año. No era una medida nuestra”. Matiza que por otro lado “también hicimos medidas de ahorro con el transporte público, que era totalmente deficitario”.
Juan Carlos Martínez asegura que todo lo ha desencadenado el sector de la construcción, ya que “veníamos de una etapa de muchos ingresos por obras que después disminuyó considerablemente”. El líder del PSC local explica que antes de 2004 todas las urbanizaciones pasaron de segunda a primera residencia y el 50% de las parcelas que no estaban edificadas, se edificaron y se consiguieron muchos ingresos.
…mientras bajan los indirectos
Los ingresos por impuestos indirectos, recaudados por el Estado y que cede en parte a las administraciones locales como el impuesto sobre el valor añadido IVA, alcohol, cerveza, tabaco, gasolina, cesión de IRPF, etcétera, han disminuido respecto a los impuestos directos. En 2010, los ciudadanos de Torrelles pagaron un total de 110.556 euros en relación a este tipo de impuestos mientras que en 2010 la cifra menguó a 9.392 euros, lo que supone que cada habitante paga 17,6 euros menos per cápita.
Las tasas, precios públicos y otros ingresos también han disminuido a lo largo de los tres años de estudio. Se trata de ingresos corrientes de naturaleza no impositiva, procedentes fundamentalmente de la contraprestación de servicios públicos y de tasas fiscales, como la recogida de las basuras, el uso de instalaciones deportivas, la ocupación del subsuelo, la instalación de marquesinas o licencias de apertura. En la tabla se observa que mientras en 2010 los habitantes de Torrelles pagaban algo más de un millón de euros (1.120.084), en 2012 la cifra se redujo en 238.218 euros, hasta alcanzar los 881.866 euros. La media per cápita de estos datos se traduce en que en 2012 cada ciudadano pagó 67,7 euros menos que en 2010. No obstante, esta cifra no es extrapolable por ciudadano, ya que buena parte de las tasas y precios públicos las abonan establecimientos comerciales y empresas, que, dada la crisis económica, han visto cerradas sus actividades y, por tanto, ha bajado la recaudación por este concepto.
Las transferencias corrientes, es decir, las cantidades recibidas sin contrapartida y destinadas a financiar operaciones corrientes (personal, servicio, gastos financieros y transferencias corrientes) se han mantenido con las mismas cifras aproximadamente, a lo largo de los tres años. Así, se mantiene las transferencias corrientes, lo que supone en 2012 un ingreso total de 1.447.095 euros, 252,1 euros per cápita.
Menos gastos en personal
En la tabla se puede observar la evolución de los últimos tres años de los gastos corrientes, es decir, de los gastos recurrentes de la actividad normal del ayuntamiento, tanto en valores absolutos como de media por habitante. En el periodo analizado ha disminuido ligeramente el gasto en personal (sueldos, salarios y gastos sociales del personal contratado y plantilla de funcionarios) en 291.513 euros, lo que supuso para los ciudadanos de Torrelles la contribución de 2.007.270 euros anuales en 2012, y una media per cápita de 349,7 euros. Miquel Yuste explica la disminución de los gastos en personal porque, aparte de ser una de las medidas de ahorro, se debe también a que se externalizó el servicio de personal de limpieza.
Por su parte, Juan Carlos Martínez, coincide con Yuste a que la disminución de gastos corresponde a la externalización de algunos servicios. No obstante es más crítico con la reducción del servicio de autobús, ya que “ha quedado una pequeña esencia de lo que era el bus urbano, pero no da el servicio necesario, ni con la misma frecuencia ni los mismos recorridos”. Afirma que “acabando con los servicios claro que puedes hacer todos los recortes que quieras”, e insiste en elaborar una política de potenciación del municipio para la obtención de más ingresos en vez de aumentar los recortes, porque entonces, “tenemos calles que se están deshaciendo, policía sin recursos y servicios a las personas que cada vez más dependen de la voluntariedad de la gente, y de esta forma no vamos a ningún sitio”. En vez de que el gobierno actúe con medidas de potenciación económica, afirma Martínez, el ayuntamiento se basa “en hacer fiestas para que la gente esté contenta”.
Los gastos corrientes en bienes y servicios, es decir, los gastos operativos de los servicios necesarios para el funcionamiento del municipio como son el alumbrado, el agua, la limpieza, la recogida de basuras, el mantenimiento de las instalaciones municipales y el cuidado de parques y jardines, se han mantenido. En 2010 el ayuntamiento de Torrelles registraba un gasto de 1.999.984 euros mientras que en 2012 era de 1.955.398 euros.
Miquel Yuste explica la variación de los gastos corrientes en bienes y servicios gracias a la actual gestión por parte del ayuntamiento. Uno de los primeros gastos que redujeron al entrar a gobernar (PiP y CiU) fue el servicio de autobús, “que costaba 200.000 euros en aquel momento y que ahora cuesta 30.000 euros manteniendo un servicio básicamente igual”. También se hicieron medidas de ahorro energético, ya que “teníamos muchos kilómetros de calles con luces que no eran necesarias, por lo que apagamos algunas farolas y ahorramos 30.000 euros más cada año”. Otra de las medidas fue asumir el servició de ocupación local, que hasta 2011 era externo y que actualmente permite el ahorro de 20.000 euros anuales al ayuntamiento.
Reducir la recogida de basuras domiciliaria
Martínez propone que para reducir costes en el ayuntamiento se reduzca el sistema de recogida selectiva de las basuras. Afirma que “tenemos uno de los sistemas más caros del Baix Llobregat y no digo que no sea productivo, pero estamos pagando cerca de 7,40 euros anuales per cápita que suponen un coste de 250.000 euros anuales”. Propone adaptar este servicio, igual que se adecuó el sistema de autobús, y todos aquellos servicios que hagan la función correspondiente pero que la repercusión para el ciudadano no sea tan fuerte.
Por otro lado, las transferencias corrientes, ayudas y subvenciones que la administración concede a otras instituciones y personas (ONG’s, asociaciones y las aportaciones a los patronatos de turismo, fiestas y deportes) se mantienen en los tres años de análisis.
Importante caída en inversiones
En 2012, el gasto de transferencias corrientes supone para el ciudadano la cantidad de 50,4 euros. Las inversiones reales, que corresponde a la inversión en obras e infraestructuras, es la partida de gasto que más disminuye de forma considerable, en parte por la polémica reurbanización de Can Coll. En 2010, el gasto ascendía a 1.374.872 euros (239,5 euros per cápita) mientras que en 2012 y con 929.798 euros menos, el gasto supuso un total de 445.074 euros (77,5 euros per cápita).
Cada habitante de Torrellas debe 53,5 euros
El pago para la amortización de la deuda del Ayuntamiento de Torrelles apenas ha variado durante los últimos tres años. Con un coste financiero en 2012 de 307.026 euros, supone una media para el ciudadano de 53,5 euros per cápita.
Los servicios públicos básicos, que recogen los gastos de las áreas de seguridad y movilidad ciudadana, vivienda y urbanismo, bienestar comunitario y medio ambiente, sí que han sufrido una disminución del presupuesto, con un total de 865.873 euros en 2012 frente al millón y medio de euros de 2010. Así, el habitante de Torrelles ha dejado de percibir servicios por valor de 277,2 euros per cápita por estos conceptos en 2010 para pasar dos años más tarde a 150,9 euros, reduciéndose, por tanto, el beneficio social de este tipo de prestación de servicios.
En las actuaciones de protección y promoción social, en las que se recogen los gastos de las áreas de pensiones y otras prestaciones económicas a favor de empleados, servicios sociales y promoción social y fomento del empleo, los datos se mantienen también estables durante los dos primeros años del análisis, pero el tercer año sube ligeramente hasta la cantidad de 82.946 euros, un total de 14,5 euros por habitante.
La producción de bienes públicos de carácter preferente, como las áreas de sanidad, educación, cultura y deporte, han variado con un recorte pronunciado en 2011, ya que la cifra disminuyó hasta los 491.454 euros frente al millón y medio gastado en 2010. En 2012, la cantidad por este concepto se equilibró hasta los 882.274 euros, que por cada ciudadano supuso una media de 153,7 euros per cápita.
Las actuaciones de carácter económico, es decir, las consideradas subáreas de agricultura, ganadería y pesca, industria, energía y comercio, turismo y pequeñas y medianas empresas, transporte público, infraestructuras, investigación, desarrollo e innovación y otras actuaciones, también siguen la misma línea durante los tres años, con una media de 226.544 euros de presupuesto, que se traduce en 39 euros per cápita.
Bajan los sueldos de políticos y personal administrativo
Por último, las actuaciones de carácter general, que recogen los gastos de los órganos de gobierno, servicios de carácter general, administración financiera y tributaria y transferencias a otras administraciones públicas, han disminuido ligeramente, sobre todo en el presupuesto del último año. Esto se traduce en que cada ciudadano aproximadamente 25,8 € menos que el año anterior para manetener los sueldos de sus representantes políticos y personal administrativo.
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