Los detenidos compraron en una ferretería las herramientas para forzar la caja fuerte de la vivienda, ya que con las que llevaban no fueron capaces de abrirla. Uno de los investigados, pese que no tenía ninguna fuente de ingresos, disponía de grandes cantidades de dinero en efectivo con las cuales había hecho obras en su domicilio, había comprado vehículos y en establecimientos de lujo e incluso había tramitado la adquisición de una licencia de VTC valorada en 130.000 euros. Otro de los autores del asalto ya había sido detenido como presunto autor material de un tiroteo que tuvo lugar en Barcelona, mientras que el tercer investigado estaba relacionado con un intento de asesinato ocurrido en Santa Coloma de Gramenet.