En España hay una crisis de credibilidad política como ilustró el surgimiento del movimiento 15M. Los viejos partidos se han alejado de la sociedad, dando la impresión de que representan más sus intereses partidistas y particulares que los del conjunto de la ciudadanía.
Los ciudadanos están reclamando una nueva forma de hacer política: creíble, transparente, dialogante, con las manos limpias, que permita rehacer los vínculos de confianza entre representantes y representados. Los viejos partidos parecen no enterarse y persisten en sus comportamientos de difícil justificación que facilitan que los ciudadanos se cuestionen si su prioridad es el interés general o el interés propio.
De esta forma, el PSC de LH ha firmado un pacto de gobierno con dos concejales tránsfugas que habían sido expulsados de su partido (Guanyem). Gracias a ese pacto, los concejales tránsfugas pasan de cobrar los 19.500 euros como concejales no adscritos a 65.500 euros como concejales adjuntos del gobierno. El PSC de LH pretende conservar las viejas prácticas del rodillo de las mayorías absolutas y por eso compra los votos que no consiguió en las urnas en vez de asumir el mandato de la ciudadanía de LH de abrir una nueva etapa de gobierno marcada por el diálogo y el acuerdo entre los diferentes grupos políticos.
Lo más sorprendente es que con la firma de este pacto, el PSC de LH transgrede el Acuerdo Antitransfuguismo promovido por el gobierno del propio PSOE en el 2006. En este acuerdo se comprometen a impedir la utilización de tránsfugas para mantener activamente las mayorías de gobierno, a no aceptar en sus equipos de Gobierno municipal a tránsfugas y rechaza que por parte del Alcalde se efectúe cualquier nombramiento político que implique atribuciones de gobierno o delegación de las mismas, con los consiguientes derechos políticos y económicos, en favor de los tránsfugas.
Por este motivo desde C’s presentamos una moción aprobada en el último pleno que instaba a la disolución de este pacto de gobierno. III
Si (
No(
