Vivimos en un mundo complicado que requiere de la colaboración de todos. Ésta es una de las conclusiones que han podido extraerse del debate organizado por BCN Content Factory, a propósito de la presentación del capítulo dedicado al mundo asociativo incluido en el libro Qui és qui. Radiografia dels qui manen al Baix Llobregat i L’Hospitalet.
Han vuelto los tiempos en los que resulta imprescindible salir a la calle y “reivindicar otra vez los derechos que se están perdiendo”. Así de contundente se ha mostrado Julio Jiménez, miembro de la Junta y expresidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos del Baix Llobregat (FavBaix), quien ha explicado cómo la entidad lleva trabajando desde finales de los años 80 de manera oficial para resolver las necesidades básicas de los ciudadanos. Entre las campañas más famosas ha citado las que consiguieron un precio razonable del recibo del agua y del transporte metropolitano, tras más de diez años de lucha.
Sin negar lo anterior, Jiménez ha admitido que se hallan en un momento crítico, pues no consiguen que los más jóvenes tomen el relevo, algo que ha corroborado Antonio Santiago, presidente de la asociación de personas con discapacidad intelectual Tots Som Santboians, quien ha mostrado su tristeza al comprobar que siempre acuden las mismas personas a los mismos actos. Clara Romero, coordinadora de la asociación Mujeres Pa’lante de L’Hospitalet, también ha detectado el problema y ha sugerido trabajar para crear “un puente entre generaciones” que permita mantener lo conseguido hasta la fecha. De hecho, una de las causas de dicho distanciamiento podría deberse a una comunicación deficiente, ya que, como ha apuntado el representante de la FavBaix, en demasiadas ocasiones las asociaciones no han sabido “vender” sus éxitos y muchos partidos políticos se han llevado el mérito de su trabajo, algo que han corroborado algunos los asistentes a la Biblioteca Central de Cornellà.
Jiménez también ha considerado imprescindible una mayor colaboración entre las distintas organizaciones sociales, así como una mayor visión comarcal: “Esto no es un tema de guerra de guerrillas. Todos somos vecinos y todos estamos obligados a trabajar por mejorar la calidad de vida de las personas de nuestros barrios”. A este respecto, Clara Romero ha explicado cómo su organización, nacida hace ocho años, ofrece una serie de servicios a mujeres de diferentes países que son posibles gracias a la colaboración con diferentes entidades especializadas en psicología o servicios jurídicos. Y Antonio Santiago ha destacado la importante labor que realizan los voluntarios de Tots Som Santboians para poder ofrecer oportunidades de ocio y tiempo libre a los jóvenes que acuden a la entidad, que cumplirá 25 años el próximo mes de octubre.
No en vano, el alcalde de Cornellà, Antonio Balmón, ha puesto en valor la tarea realizada por miles de personas anónimas que contribuyen a que no se pierda “el origen y la personalidad” del Baix Llobregat. El primer edil también ha valorado la capacidad de diálogo del mundo social, del que deben aprender los políticos, y su poder para hacer “presión” a los Ayuntamientos.
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