Los ciudadanos se extrañan cuando ella entrega su tarjeta con los datos de contacto. También su móvil directo. Es un pequeño gesto, pero que revela como Cristina Manresa, comisaria jefe de la Región Policial Metropolitana Sur de Mossos d’Esquadra, rompe moldes allí por donde va.
Nacida en Badalona, Manresa es ya una de nuestras lideresas más importantes del territorio desde que en 2009 fuera la primera mujer elegida para ocupar un mando regional de la policía catalana. 26 años tuvieron que pasar para que esto ocurriera, algo que, por cierto, no se ha vuelto a dar. Fue entonces la primera y, hoy en día, sigue siendo la única. “El día que deje de ser noticia, será que la situación está normalizada. Falta mucho camino por recorrer a nivel de cargos policiales”, explica Manresa en una entrevista a El Llobregat. “Mi mundo sigue siendo muy machista”.
‘Excesiva testosterona’
Pero en ese mundo, en lugar de amedrentarse, Manresa saca su estilo directo, claro, alejado de formalidades y, en definitiva, próximo para romper, como ella ha reconocido, con “la excesiva testosterona”. Es así como la licenciada en Historia del Arte y diplomada en Criminología se ha erigido como una acérrima defensora del modelo de policía de proximidad. “Encuentro mucho en falta –que me dan ganas de llorar a veces y todo- el contacto con los ciudadanos. A mí me apasionaba: la gestión con el ciudadano, estar en las reuniones y entre todos solucionar alguna problemática. Yo me considero una policía de proximidad; la gestión me aburre más. Por eso intento, siempre que puedo, ir a las comisarías, reunirme con la gente, ir a las Juntas de Seguridad… Creo en esta Policía de proximidad que permita la representación ciudadana en las mesas de los operativos: nosotros, los representantes políticos y la ciudadanía. Es el futuro”.
Los datos de victimización la avalan, actualmente, con las Áreas Básicas Policiales disminuyendo las estadísticas delictivas. Y eso ocurre en un territorio complejo, heterogéneo, con ciudades en el sur y pequeños municipios en el norte, capaz de organizar grandes eventos, con mucho turismo, con costa marítima y montaña, con grandes infraestructuras… “El Baix Llobregat es una comarca tranquila. El que llega a una ABP aquí, llega para quedarse. De hecho, normalmente los agentes viven aquí con lo que conocen mejor el territorio”.
Manresa ha cumplido ya las bodas de plata en el cuerpo y es, para el territorio Llobregat, un referente de liderazgo, en este caso, en el ámbito policial. III
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