Pese a que la entidad ha logrado que todos los grupos municipales de L’Hospitalet en la oposición, excepto el Partit Demòcrata Català o antigua Convergència, se hayan manifestado en contra del proyecto, el verdadero motor de oposición contra el Plan Director Urbanístico de la Granvia-Llobregat ha salido de la calle. Con una implicación encomiable, tanto en los barrios como en el mundo digital, diferentes colectivos de la ciudad, liderados por ‘No Més Blocs’, han logrado poner sobre la mesa un debate que, en un principio, parecía impensable.
Han conseguido que Territori i Sostenibilitat modificara la primera propuesta de PDU y, ahora, han concluido el periodo de alegaciones de esta segunda propuesta con un nuevo golpe de efecto por su parte.
La entidad ha presentado, en total, unas 500 alegaciones contra el proyecto de reforma de la Granvia en su tramo entre la Plaza Europa y el río Llobregat. Así lo han presentado diferentes representantes del colectivo en la Asamblea Vecinal ‘No Més Blocs’: “Valoramos muy positivamente la campaña que hemos llevado a cabo frente a la celeridad veraniega de la aprobación del PDU Granvia. […] Inspirándonos en los compañeros de ‘L’Horta de València’, hemos alegado, para poner piedras, palos, ramas y troncos al camino de cemento de la administración”.
Por otro lado, el colectivo no reconoce el período de exposición pública y lo califica de “opaco”. Por ello, reclaman un verdadero proceso participativo accesible, además, a colectivos como jóvenes menores de edad, personas en situación irregular, invidentes, que hablan otros idiomas a los oficiales, entre otros colectivos. “Nos hemos crecido y hemos conseguido poner sobre la mesa el debate sobre la legitimidad de un PDU gestado a espaldas de los vecinos de la ciudad y en contra de sus intereses y sus necesidades”, recoge el manifiesto de la entidad.
A la espera de que este proceso participativo llegue -que no está previsto-, la entidad ciudadana continúa con su movilización y ha anunciado una nueva campaña informativa que explicará las consecuencias negativas del proyecto en institutos y otras instituciones de la ciudad. Según han expresado, la lucha está centrada en la protección del territorio (con este y con otros PDU como, por ejemplo, el Plan Caufec), con un acento que pone en duda el modelo de ciudad y la concepción de progreso. En cualquier caso, y apuntando a cuestiones concretas, la entidad considera que hay otras prioridades como resolver las escuelas que continúan ejerciendo en barracones, generar verdadera ocupación de calidad o soterrar, algo que sí que es fundamental, las vías del tren que siguen desquebrajando la ciudad.