Los grandes deportistas no solo lo son por llegar los primeros a la meta o por ser los mejores en sus disciplinas, sino que cuentan, también, con la capacidad de renunciar a lo deportivo si las causas humanas lo merecen. En este sentido, la piloto corberense Laia Sanz ha vuelto a demostrar su lado más humano con un nuevo gesto de deportividad, de nuevo, con Pierre Alexandre Renet como protagonista.
Sanz no dudó en parar su moto para socorrer, junto al chileno Daniel Gouet, al francés Pierre Alexandre Renet tras sufrir un grave accidente en la segunda etapa del Atacama Rally. La piloto de KTM estuvo con él casi una hora a la espera del helicóptero de asistencia y ayudando en las tareas de evacuación. Y es que Renet sufrió fracturas en su hombro, codo y costillas del lado derecho de su cuerpo, además de una lesión cervical. Lo curioso es que ya es la tercera vez que Sanz acude en la ayuda del también conocido ‘Pela Renet’, tras hacerlo en el Dakar de 2016 y en el Rally de Marruecos de 2015. “Cuando pasa algo así, es difícil. Da igual quien sea, pero si encima es alguien a quien conoces, te queda muy mal cuerpo”, ha dicho Sanz tras el accidente.
Como tiene que ser en estos casos y para premiar el buen comportamiento de los deportistas, la organización ha decidido devolver el tiempo a Sanz que acabó –por seguridad- la etapa (308 km) en el kilómetro 164 al quedarse la competición sin la cobertura del helicóptero que trasladó al francés. En estos momentos, Sanz va 11ª en la general tras acabar en esta misma posición en la segunda y en la tercera etapa, la más larga y rápida hasta ahora de la prueba. Ni siquiera el resfriado que arrastra le ha hecho perder la undécima posición en la que se encuentra instalada y en la que se encuentra cómoda, puesto que considera el Rally un entreno para la gran prueba del Dakar. Aun así, se encuentra a apenas 13 minutos del top-10.
El líder es Pablo Quintanilla, del mismo Chile y vigente campeón del mundo de esta especialidad.