Casi tres años han pasado desde que una información anónima llegase, en mayo de 2015, al correo [email protected] del Cuerpo Nacional de Policía; una información que alertaba de la posible actividad delictiva de un grupo de personas y que, ahora, se ha demostrado cierta.
Agentes de la Policía Nacional han detenido, en L’Hospitalet, a siete personas por presuntos delitos de tráfico de drogas y dan por desarticulada un importante grupo organizado. Y es que, según fuentes policiales, este de grupo de personas, liderados por un hombre de origen marroquí, se encargan de hacer pasar la droga a España y desde aquí distribuirla en toda la zona metropolitana de Barcelona, pero también por el sur de Europa.
En el marco de la operación, la investigación ha incautado más de 2.300 kilos de hachís y casi 56.000 euros en efectivo, además de nueve vehículos y 13 teléfonos móviles. Según el CNP, introducían los estupefacientes por Marruecos por una rama de la organización u otras afincadas en el litoral del sur peninsular para almacenarlos también en provincias como Cádiz, Málaga o Sevilla.
Desde aquí, a bordo de furgonetas auxiliadas por vehículos que iban delante para detectar posibles controles policiales, la droga era transportada hasta Barcelona en donde se guardaba simplemente en plazas de parking dentro de las mismas furgonetas o en trasteros anexos, a la espera de la distribución a terceras personas. Detectada la actividad ilícita, la Policía Nacional organizó el correspondiente operativo.
De esta manera, el CNP suma un nuevo caso de éxito a partir de esta vía de comunicación ciudadana. Según el cuerpo, desde su puesta en funcionamiento, en 2012, han recibido unos 53.000 correos que, tras ser analizados por la Brigada Central de Estupefacientes, han podido descubrir puntos negos de venta de droga, iniciar investigaciones como ésta sobre narcotraficantes, aprehender plantaciones caseras de marihuana o localizar, entre otras cuestiones, locales de ocio dedicados a la distribución de sustancias estupefacientes.
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