Finalmente habrá elecciones. No es fácil para quien ha ganado unas elecciones tener que volver a convocarlas. Pero el bloqueo permanente de unos y la ambición personalista de otros lo han hecho inevitable.
Antes que un gobierno frágil, condicionado y previsiblemente de vida corta, mejor dar nuevamente la voz a la ciudadanía.
Los retos que nos aguardan requieren un gobierno estable, con capacidad de acción y mirada a medio y largo plazo. Me refiero a la batalla contra el cambio climático, la recuperación de derechos, la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, la lucha contra la violencia machista, la defensa de los valores democráticos y de la memoria histórica, la necesidad de hacer frente a la amenaza del Brexit, el abordaje desde la ley y el diálogo del conflicto político en Catalunya, el fomento de una nueva economía más justa, sostenible e innovadora... Son todos ellos retos que afectan a Sant Boi, como al conjunto de ciudades del país. Con una singularidad.
Nunca antes habíamos tenido la oportunidad de contar con una santboiana en el Congreso de los Diputados, que pudiera velar por que se dé respuesta a las viejas demandas y a las nuevas necesidades que tenemos como ciudad.
En nuestras manos está de nuevo el futuro que queremos para Sant Boi y para el conjunto de España.
Si (
No(
