Desde la Federación Española han asegurado que fue Moreno quien les dijo que el asturiano quería volver al banquillo de la Roja, tras abandonarlo por la enfermedad y posterior muerte de su hija.
Relevo en el banquillo de la selección española de fútbol. El hasta ahora seleccionador, Robert Moreno, deja el cargo tras confirmarse que Luis Enrique, que lo dejó en junio por la enfermedad de su hija, volverá a ocuparlo. En una larga rueda de prensa, el presidente de la Federación Española de Fútbol Luis Rubiales, acompañado por el director deportivo, José Francisco Molina, han explicado la sucesión de los hechos que han llevado a Luis Enrique de nuevo a dirigir a la selección española de fútbol, tras confirmarse ayer su clasificación como cabeza de serie para la Eurocopa del año que viene.
Rubiales y Molina sostienen que fue Moreno quien les comunicó que su antecesor quería volver al puesto de seleccionador. Desde la Federación, en su día, ya dejaron claro que en darse esta situación, el asturiano tendría las puertas abiertas. "Luis Enrique es el líder de este proyecto", ha comentado Rubiales, que ha expresado su satisfacción por el trabajo de Moreno al frente del equipo nacional. Tras saber que Luis Enrique quería volver, por boca de Moreno, Rubiales y Molina se reunieron con el ex seleccionador, el 31 de octubre. Tras esa reunión, constatan que Luis Enrique quiere volver y comienzan a hablar con todas las partes para ver cómo proceder. Fue en este momento que Moreno les dice que quiere negociar su salida para no ser un impedimento para la vuelta de Luis Enrique. "Nosotros somos los primeros sorprendidos", ha reconocido Rubiales, que dice que Moreno les dijo que quería marcharse antes del partido de Rumanía de ayer -y que finalizó con la victoria por 5-0 de España-. Este martes tenían una reunión con Moreno, que dicen que no se ha presentado y, en su lugar, ha enviado a dos abogados.