En la última década, la industria del motor ha reinventado su oferta comercial: de vender velocidad y carrocería, ha pasado a procurar destacar por tecnología, conectividad y consolas. Desde la fuerza hacia la inteligencia. Del “SEAT 600” al CUPRA.
La robótica experimentó un avance cualitativo cuando en 1997, la máquina Deep Blue consiguió ganar por 3,5 a 2,5 al entonces campeón del mundo de ajedrez, Garry Kaspárov. Deep Blue fue un avance en la computación paralela, desarrollada por un equipo de ingenieros de IBM, entre los que estaba el gran maestro español Miguel Illescas.
El interés de SEAT por la inteligencia artificial, curiosamente tiene antecedentes olvidados: enterrado en la historia encontramos el Club de Ajedrez Grupo de Empresas SEAT. Sí, la compañía automovilística mantuvo, entre 1964 y 1995, un club de ajedrez integrado en gran medida por trabajadores del grupo de empresas y reforzado por fichajes que fueron sonados en su época.
El deporte ciencia, el deporte de la inteligencia, el ajedrez, forma así parte de la historia de SEAT. Durante treinta años, la firma automovilística fue un referente en el mundo del ajedrez, con la colaboración inestimable del que fue presidente del club durante muchos años: Fernando Molina Solís, que también formó parte de la junta directiva de la Federación Catalana de Ajedrez durante el mandato de Joan Segura Vila (también jugador del SEAT).
SEAT fue un club relevante: en 1968 quedó campeón de España de Educación y Descanso. Su época dorada llegó en los años setenta: en 1973, fue cuarto en el Campeonato Absoluto de Cataluña por Equipos, en 1974 tercero y en 1975 quedó subcampeón absoluto de Cataluña por Equipos. En esa época, el equipo, que jugaba en las instalaciones de Zona Franca, estaba integrado por los jugadores: Jaime Lladó (campeón individual de España), Fermín Tejero (campeón de Cataluña), Joan Bautista, Jesús Colomer, Joan Segura, Alexandre Abejón y Josep Collado.
También formaban parte del equipo los trabajadores de SEAT: Vitoriano Soria, Cecilio Domínguez, Joaquín Bescos y Antonio Jiménez y los hijos de trabajadores de SEAT Javier Quesada y Jesús López. Precisamente en el año 1975, en el polideportivo que SEAT disponía en Zona Franca se celebró el Campeonato de España por Equipos y el club de la compañía también se clasificó para jugar esas finales, en la que quedó segundo en la categoría de segunda división estatal.
Poco antes de la disolución del club en 1995, el equipo contaba con jugadores de relevancia: José Monedero (excampeón de Cataluña Absoluto), Josep Chalmeta, Florentino Rodriguez y Antonio López Manzano, hijo de trabajador de SEAT y actual gerente de la Federació Catalana d’Escacs.
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