El Ayuntamiento de Molins de Rei combate el covid-19 con un servicio de agentes cívicos. Seis personas, divididas en tres parejas, recorren las calles de la población con el objetivo de concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de aplicar las medidas de prevención decretadas por las autoridades. Asimismo, reparten mascarillas a personas de distintos sectores del municipio.
Su cometido principal es garantizar que los vecinos respeten la distancia de seguridad y usen mascarillas, especialmente en espacios concurridos, como terrazas. Pero también controlarán que se cumpla la normativa relacionada con civismo, regulada en la Ordenança de Convivència Vilatana, que vela por el buen uso de la vía pública.
Los agentes cívicos no tienen potestad para denunciar las deficiencias detectadas, pero sí las notifican a la Guàrdia Urbana y a los diferentes departamentos responsables. En caso de infracción grave o reincidencia, el cuerpo policial iniciaría la apertura de diligencias contra las personas infractoras.
2.422 casos sospechosos
Molins de Rei, que tiene una población de 25.868 habitantes, ha registrado 348 contagios desde el inicio de la pandemia, pero los casos sospechosos ascienden a 2.422, y el índice estandarizado de positivos por 100.000 habitantes es de 140. Con estas cifras en mente, el consistorio ha apostado por el servicio de agentes cívicos para reducir la incidencia del virus en el municipio.
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