Sant Joan Despí ha recordó ayer 14 de noviembre a las víctimas que la pandemia del Covid-19 ha dejado en el municipio del Baix Llobregat. El emotivo acto se celebró en el parque de la Fontsanta donde se reunieron los familiares de las víctimas, personal de los servicios esenciales, representantes de entidades ciudadanas y concejales y concejalas del Ayuntamiento.
La entrega de rosas blancas alrededor de un olivo, como símbolo del recuerdo de las personas que han fallecido estos meses, ha sido la clausura del acto en que la ciudad ha rendido homenaje a las víctimas y han expresado el pésame de la comunidad a las familias.
La Escuela de Música Enric Granados y la cantante Mireia Dolç han interpretado varias piezas musicales como participación en el acto, donde también ha tenido lugar la lectura de poemas de Miquel Martí i Pol y de Joana Raspall.
La alcaldesa de Sant Joan Despí, Belén García, ha estado presente en el acto y ha expresado: “Mujeres y hombres que vivieron y convivieron con nosotros, seres queridos que nos han dejado su huella personal, vecinos y vecinas a los que echaremos de menos. Estarán siempre a nuestro recuerdo y la ciudad no los olvidará”.
El acto no solo ha sido un homenaje a las víctimas, también es un reconocimiento a la solidaridad que ha surgido entre la ciudadanía con la pandemia y el gran trabajo y dedicación de los servicios esenciales. El homenaje contó con la presencia de representantes de centros de atención primaria, del Hospital Moisès Broggi, de las residencias de ancianos, farmacias, Policía Local, Mossos d’Esquadra, personal de limpieza, voluntariado o del comercio, entre otros.
García ha querido recordar iniciativas solidarias que se llevaron a cabo durante la pandemia como la confección de mascarillas o fabricación de viseras. "Como comunidad, hacemos un reconocimiento al esfuerzo que, durante los días más duros del estado de alarma, realizaron los servicios esenciales. Especialmente, el personal sanitario, que se puso estoicamente en primera línea", ha expresado la alcaldesa.
El olivo del parque de la Fontsanta, donde se ha realizado el acto de homenaje, ha sido plantado como símbolo de recuerdo de las víctimas que el Covid-19 ha dejado. Todos los participantes del acto se han acercado hasta el olivo donde han dejado una rosa blanca como reconocimiento personal y grupal a las personas que han perdido la vida durante la pandemia.