El próximo 18 de noviembre es el Día Mundial para la Prevención de las Lesiones por Presión, las cuales afectan por lo general a personas mayores y dependientes. El centro del Parc Sanitari Sant Joan de Déu afirma que atiende a personas jóvenes que presentan estas lesiones tras haber estado hospitalizadas y superar el Covid-19.
Estas heridas se suelen producir en partes del cuerpo donde se presiona la piel contra una superficie exterior y las zonas más habituales suelen ser las caderas, los talones y la parte inferior de la espalda. El enfermero consultor en heridas crónicas del Hospital de Sant Boi del Parc Sanitari Sant Joan de Déu, Pere Coca, explica que “pueden causar complicaciones severas como una incapacidad o infecciones recurrentes”.
Cristina Jiménez, especialista en lesiones vinculadas con la dependencia añade que “exudan mucho y acostumbran a desprender un olor fuerte, lo que limita la socialización, provoca aislamiento y falta de autoestima”.
El Hospital de Sant Boi, pionero en implantar una opción terapéutica
Uno de los pocos hospitales del estado español en ser pionero en regular el uso de sevoflurano como anestésico para la piel para tratar estas heridas, es el Hospital de Sant Boi. Es un medicamento que es un anestésico inhalado y que según argumenta Coca “según sugieren las investigaciones disponibles, aplicado de forma local tiene un uso antimicrobiano y analgésico muy potente que dura horas”.
Coca afirma que el 95% de los casos se puede prevenir estas lesiones y la clave se encuentra en cómo se forman los profesionales y el empoderamiento de los cuidadores/as. El Hospital de Sant Boi dispone de una Unidad de Heridas Crónicas que está formada por un equipo multidisciplinario. En este servicio, no solo se realizan curas, sino que también ofrecen un contacto directo a los usuarios una vez se da el alta para agilizar la asistencia de cualquier tipo de dudas que puedan tener en los hogares.