Sant Feliu presentó el proyecto A-porta el pasado 27 de noviembre, una iniciativa de la CONFAVC y la cooperativa iesMed SCEL para el apoderamiento y la mejora de la calidad de vida de los vecinos de los barrios, en un acto de presentación que contó con la presencia de la alcaldesa de la ciudad, Lídia Muñoz, la regidora de Servicios Sociales, Flavia Reina, y los representantes del proyecto. Este proyecto se desarrollará en un total de 500 viviendas del barrio de Can Calders en los próximos días.
El proyecto A-porta se desarrolla con una mirada hacia la sostenibilidad, y que supone una oportunidad de contribuir en la consecución de los ODS de Sant Feliu. Y es que esta iniciativa trata de generar un impacto en sus tres grandes ejes: social, medio ambiental y económico.
La alcaldesa anunció el inicio del proyecto A-porta en el municipio, que tiene como objetivo el apoderamiento vecinal y el refuerzo del sentimiento de comunidad. La regidora Flavia Reina quiso destacar que se trata “de una tarea importantísima en un escenario de pospandemia en el que muchas personas se han visto obligadas a restringir los contactos con familiares, amigos y vecinos, y hace falta volver a tejer las redes comunitarias que se han podido romper con la crisis de la COVID-19”.
El director de alianzas de AGBAR, Manel Giraldo, agradeció al Ayuntamiento de Sant Feliu la confianza en el proyecto, recordando que se trata de una iniciativa de éxito en otros municipios de Cataluña. Además, señaló que, a través de las Pica Portes, muchos vecinos y vecinas tienen la oportunidad de beneficiarse de ayudas en la factura del agua y conseguirán hacer un uso más ajustado de sus necesidades.
El presidente de la CONFAVC, Jordi Giró, agradeció al Ayuntamiento su apuesta por el proyecto y sobre todo a las entidades, y especialmente a la Asociación de Vecinos de Can Calders, por su colaboración en el desarrollo y la difusión del proyecto en el barrio.
Finalmente, la coordinadora del proyecto, Esther Lumière, presentó al barrio de Can Calders el equipo de Pica Portes, que en los próximos días comenzarán a realizar visitas a los hogares del barrio. Este equipo está formado por 8 mujeres, todas vecinas de Can Calders, que mostraron su satisfacción por la puesta en marcha del proyecto.
A-porta permitirá al Ayuntamiento tener proximidad con la ciudadanía, un conocimiento personalizado de las necesidades del vecindario, así como poder identificar y llegar a todas las personas que necesitan ayuda.
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