El Ayuntamiento de Esparraguera ha solicitado al Departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña que revise el plan sectorial de gestión de la infección por COVID-19 en el ámbito residencial. Para ello, han contactado mediante una carta al consejero de Salud, Josep Maria Argimon, a quien han reclamado que tenga en cuenta la sectorización en grupos de convivencia que se aplica en la residencia municipal Can Comelles. Además, han pedido que se eviten los confinamientos generalizados, ya que estos tienen efectos muy negativos en el bienestar emocional, psicológico y social de los ancianos y ancianas.
En este comunicado, que está firmado por el alcalde de Esparraguera, Eduard Rivas, y la regidora de Personas Mayores, María Vallejo, afirman que en todo momento el consistorio ha aplicado con rigurosidad los protocolos y medidas aprobados por el gobierno catalán. Pese a ello, mencionan que “la situación actual, con un elevado número de contagios en toda la población propiciados por la variante ómicron, está provocando que, frente a un caso positivo dentro de la residencia, se tenga que aplicar el confinamiento en todas las personas usuarias tanto de la residencia como del centro de día, independientemente de si son considerados contactos directos o no”.
Esta medida, que se aplica como cumplimiento del plan sectorial, “está proporcionando una situación de aislamiento continua de los residentes, los cuales se ven afectados emocionalmente, junto con sus familias”. Debido a esto, el Ayuntamiento ha solicitado al Departamento de Salud que “se revise el protocolo y las medidas que se derivan, con tal de llegar a una aplicación mucho más ajustada a las realidades particulares de los servicios”. Por ello, han reclamado que en caso de confinamiento tengan en cuenta la sectorización aplicada y que este afecte únicamente en las personas consideradas contactos directos, evitando así los confinamientos generalizados en todo el centro.
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