El Ayuntamiento de Viladecans ha presentado el proyecto definitivo de urbanización de la rambla Modolell, el cual se ha llevado a cabo a través de un proceso participativo. Según han indicado, la futura rambla se pacificará con restricciones respecto al tráfico de vehículos, por lo que tan solo podrán circular por ella los vecinos, vados, servicios y mercaderías comerciales. Además, este proyecto también convertirá las calles del entorno, como los de la Antigua Riera, de Sitges o el paseo de la Unió, en zona peatonal. De esta manera buscan extender esta zona por el Barrio Antiguo, y la renovación potenciará el carácter ciudadano y verde del paseo.
Por otro lado, el estacionamiento regulado actual se trasladará a la calle del Llevat y, a petición de los vecinos, el Ayuntamiento estudiará convertir el uno de los carriles de circulación de la avenida de Francesc Macià en estacionamiento para que, durante determinadas horas del día, responda a las necesidades de aparcamiento y carga y descarga de mercaderías. También los contenedores de residuos se trasladarán a calles adyacentes.
Según está previsto en el proyecto, en cada lado de la calle se mantendrán los árboles actuales, intercalándolos con nuevos espacios de descanso y con las terrazas de restauración, las cuales estarán limitadas a 16 mesas como máximo por local. De esta manera, se espera que el verde gane protagonismo, por lo que también incluirán zonas de hierba y de arbustos, manteniendo un formato de paseo abierto.
La regidora del Distrito I, Rosa Cañisá, ha agradecido “las aportaciones de todos en el proceso participativo”, las cuales ha señalado que “han quedado reflejadas en el proyecto”. Por otra parte, el teniente de alcalde de Planificación Territorial, Richard Calle, ha asegurado que “pese a que las obras supondrán algunas molestias, el resultado será muy positivo para la viuda ciudadana, social y económica de esta zona de la ciudad”. Además, ha informado de que se prevé que estas obras comiencen durante el otoño, “posiblemente en el mes de octubre”, y que la primera fase, que tendrá lugar entre la avenida de la Generalitat y la calle de Santa Teresa, se alargará “aproximadamente un año”.