La Universidad de Barcelona, en colaboración con el servicio de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica, ha comenzado con la primera campaña de excavación arqueológica en el castillo de Voltrera de Abrera. Esto se lleva a cabo en virtud del convenio firmado entre la UB y el Ayuntamiento de Abrera el pasado 2021 para el estudio científico de este monumento, el cual ha sido declarado Bien Cultural de Interés Nacional.
Esta campaña de excavaciones es la primera que se realiza de manera reglada en este yacimiento arqueológico y, según está previsto, la actuación durará hasta el sábado 2 de julio. Estos trabajos estarán bajo la dirección científica y arqueológica de Maria Soler Sala y Walter Alegría Tejedor, y los llevarán a cabo los estudiantes del Grado de Arqueología de la Universidad de Barcelona. A través de esta actuación esperan poder concluir la excavación de la iglesia románica y de los silos de su interior, la cual quedó inacabada durante el proceso de control arqueológico vinculado a las obras de consolidación.
Para llevar a cabo estos trabajos, los arqueólogos utilizarán técnicas de excavación manual y en extensión y, además, realizarán una primera actuación de sondeo sobre las estructuras del castillo medieval. A lo largo del proceso también se encargarán de documentar con detalle los muros que permanecen en pie y, a través de diversas calas, se realizará la primera aproximación en la parte más antigua del castillo.
Antecedentes de actuaciones no controladas
Según ha informado el Ayuntamiento de Abrera, el castillo de Voltrera nunca ha sido objeto de excavaciones arqueológicas sistémicas, de forma que sus estructuras soterradas son todavía desconocidas. Pese a ello, durante los años setenta y ochenta del siglo pasado, este espacio fue objeto de actuaciones de excavación no controladas por parte de la Sección de Integración Subterráneas (SIS), hoy en día conocida como Centre Muntanyenc y de Recerques Olesà. Durante estos trabajos localizaron una importante colección de objetos cerámicos, los cuales se han cedido recientemente al Ayuntamiento de Olesa de Montserrat. Según han señalado, estas actuaciones se llevaron a cabo, especialmente, en el foso norte y sur del castillo, pero afectaron también al espacio interior del castillo medieval.
Finalmente, en los últimos años, con el objetivo de frenar la degradación de las estructuras y evitar que supongan un peligro para la población, el Ayuntamiento de Abrera ha dado comienzo a un proceso de consolidación arquitectónica. El arquitecto Joan Antoni Pérez Farriols, desde la Diputación de Barcelona, ha sido quien ha elaborado este proyecto, con el objetivo de estabilizar las estructuras del castillo y llegar a abrir al público el conjunto de este monumento.