Infraestructuras y economía marcarán el camino electoral a las urnas del 28M

Esto conlleva que, a la hora de decidir el voto, los ciudadanos tienenmás presentes en la cabeza los problemas locales y territoriales (es decir, los concretos de cada municipio) que la situación socio-económica del país. Pero en los próximos comicios del 28M es posible que la profunda crisis actual, la inflación desorbitada, la subida del IPC y los tipos de interés y la exacerbada escalada del precio de los alimentos condicionen el color de las papeletas que acaben depositadan en el fondo de las urnas y que no se vote en clave tan localista como en ocasiones anteriores (en 2019, por ejemplo). Pero puede provocar que se dispare la abstención. Lo que sí parece claro, como coinciden en señalar los agentes sociales del territorio consultados, las infraestructuras y la gestión de la movilidad van a ser temas clave en los debates sin olvidar, claro está, las prioridades de cada ciudad.

La actual situación de crispación de la vida política española -con continuos escándalos, salidas de tono y ácidas polémicas- no debería condicionar el comportamiento del electorado del Baix Llobregat y L'Hospitalet en los próximos comicios municipales. Josep M. Romero Velarde, secretario general del sindicato en el Baix Llobregat, Alt Penedès, Anoia y Garraf es de los que sostiene que "en las elecciones municipales prima la realidad más inmediata, la proximidad de problemáticas y cuestiones concretas del municipio" Y en eso influye, según Romero, el hecho de que "se vote a personas concretas y no tanto a un partido, una ideología o a valores más generales".

En términos casi idénticos se posiciona M. Rosa Fiol, vicepresidenta y directora general de Asociación Empresarial de L'Hospitalet y el Baix Llobregat (AEBALL), para quien "las elecciones municipales son muy personalistas. Las personas que lideran las listas tienen más peso que los partidos que representan".

Joan Soler, presidente de PIMEC Baix Llobregat - L'Hospitalet también opina que las elecciones municipales "son en clave de territorio" y que, por tanto, en esta campaña electoral que tenemos a la vuelta de la esquina van a predominar "los temas locales de cada municipio. Tanto los ciudadanos como las empresas del territorio tienen un verdadero interés en conocer las propuestas sobre las cuestiones que les afectan de forma inmediata", asegura Soler.

Lo que parece "descartado" es que las municipales del Baix y L'Hospitalet acaben convertidas "en una primera vuelta de las elecciones generales", indica Juan Carlos Fernández, secretario comarcal de UGT en el Baix Llobregat. "En las Elecciones Municipales lo que nos jugamos son las políticas sociales y la gestión de los ayuntamientos en los próximos cuatro años", subraya Fernández. Por este motivo y "por regla general, se vota a la persona y muchas veces las siglas se dejan a un lado" a la hora de elegir candidato.

No obstante, parece difícil que los asuntos 'del bolsillo' no acaben repercutiendo en el escrutinio. Para Fiol, la agenda electoral temática del 28M en el Baix y L'Hospitalet vendrá marcada por " la presión fiscal, que no para de crecer, así como la inflación y los costes de los bienes y servicios esenciales", acompañada de otros asuntos "más locales como servicios, infraestructuras o fiscalidad", apunta la vicepresidenta de AEBALL.

Los sindicatos comparten la visión dela patronal. "Efectivamente, los elementos más vinculados a la situación socioeconómica que afectan a la vida cotidiana de las personas, tendrán un peso muy relevante en el ejercicio del voto de la ciudadanía", aventura el secretario general comarcal de CCOO. Y argumenta tu tesis: "Cabe recordar que las desigualdades están creciendo. En Catalunya hay más de 350.000 personas desempleadas, con un paro de larga duración que afecta a 150.000 personas (tres de cada cuatro con 45 años o más). Además, el desempleo tiene rostro de mujer y de joven. Seguro que la dimensión más material (económica) condiciona inevitablemente la orientación del voto", postula Romero Velarde.

Por este motivo "garantizar el trabajo digno, la protección social y las transiciones justas para las personas en un contexto de cambios tecnológicos, demográficos y ecológicos como el que vivimos ahora, deberían ser los grandes retos reflejados en los programas electorales de todas las fuerzas democráticas del Baix Llobregat", subraya el líder sindical.

El presidente de PIMEC en el territorio también augura que "la compleja situación económica que están atravesando las empresas, con subidas en los costes de producción, energía e impuestos tras el covid-19, va a tener incidencia en la campaña". Razón no le falta pues, en algunos municipios de la comarca "los impuestos y tasas que sí dependen de los ayuntamientos se han visto incrementados de forma muy significativa". En todo caso, que las cuestiones económicas centren o no el debate electoral de las municipales va a depender "de las propuestas que hagan los partidos políticos que se presentan", incide Juan Carlos Fernández. No obstante, y aunque las políticas económicas, laborales y sociales son de ámbito estatal "sin duda el alza del coste de los precios, el IPC y la inflación pueden influir en la decisión del voto", "Los ayuntamientos deben dar respuesta a esta crisis económica que afecta especialmente a los ciudadanos con menos recursos", propone Fernández. general.

El otro caballo de batalla de la campaña del 28M pueden ser las infraestructuras, porque cuestiones como la ampliación del aeropuerto Josep Tarradellas de Barcelona-El Prat, el Parc Agrari del Baix Llobregat o las necesidades viarias, de transporte y de movilidad, así como los proyectos pendientes (como la autovía B-25) están en la calle, en boca de todos. El líder comarcal de UGT está convencido de que estos asuntos "estarán en el centro del debate político de la campaña" y, por lo tanto, "es importante saber si los candidatos se posicionan a favor o en contra de cada proyecto y si disponen de voluntad para buscar acuerdos entre los agentes sociales, políticos y económicos con vistas a que se realicen o no", puntualiza Fernández.

Romero Velarde discrepa porque apunta a que las infraestructuras "aunque son una prioridad, no son competencia municipal, por lo que no deberían tener un impacto excesivo en los debates y en el ejercicio del voto en el Baix Llobregat", sostiene. Eso sí, "a excepción de la ampliación del aeropuerto, que tendrá un peso específico y determinante en El Prat y, en menor proporción, en Gavà, porque forman parte de su identidad y de su proyecto de ciudad", apostilla el secretario general de CCOO del Baix. Lo mismo piensa la directora general de AEBALL pues sostiene que este tipo de asuntos "solo tienen influencia en una parte muy reducida de la población"

Joan Soler también se apunta a que habrá debate en las municipales sobre la ampliación del aeropuerto porque "las ciudades de la zona del Delta viven con inquietud la situación actual, con un incremento de vuelos y de decibelios". El presidente de PIMEC va más allá y añade "la gestión de la movilidad" -el carril bus de la B-23, las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) o el acceso a las zonas industriales, entre otras cuestiones- a la lista de puntos calientes y "relevantes" de la campaña y de la agenda política.

Desvinculados de la política

Uno de los hándicaps a los que van a tener que hacer frente partidos y candidatos a las diferentes alcaldías del territorio es que "la población general está bastante desvinculada de la política", advierte Juan Carlos Fernández, secretario comarcal de UGT en el Baix Llobregat. Eso, en términos electorales, es sinónimo de abstención. Es más, "la visión y las críticas hacia los poderes públicos pueden influir en la decisión del voto", analiza Juan Carlos Fernández. M. Rosa Fiol, vicepresidenta y directora general de Asociación Empresarial de L'Hospitalet y el Baix Llobregat (AEBALL) también cree que "el (actual) deterioro de las relaciones institucionales afecta en la desafección de la gente por la vida política y, por tanto, por las elecciones. Desgraciadamente las abstenciones creo que seguirán creciendo", augura la dirigente patronal. Para Josep M. Romero Velarde, secretario general de CCOO en el Baix Llobregat, Alt Penedès, Anoia y Garraf, uno de los antídotos contra el absentismo en las urnas -fruto de la incertidumbre y la inestabilidad- puede ser que las diferentes formaciones que concurren a los comicios del 28M apuesten "por una campaña electoral en positivo, que afecte a la vida cotidiana y a políticas vinculadas a los barrios, al modelo de ciudad, una campaña que toque la dimensión más tangible, de afectación concreta a los espacios de vida cotidiana de los ciudadanos", incide Romero . Como presidente de PIMEC en el Baix y L'Hospitalet, Joan Soler asegura que los empresarios"no podemos pensar en la abstención. Hay que elegir, actuar. Seguimos pedaleando". Ojalá sus buenos propósitos contagien a un electorado que parece llamado a dar la espalda a las urnas más que nunca en las próximas municipales. III

Revalorizar el Parc Agrari, en el centro del debate

Según PIMEC Baix Llobregat-L'Hospitalet, uno de los ejes de la campaña electoral del próximo 28M, en especial en los municipios del Delta del Llobregat, va a ser el Parc Agrari del Baix. "Es necesario revalorizar el Parc Agrari, ser conscientes de que es nuestro huerto, el que nos suministra comida", defiende Joan Soler. El dirigente empresarial es partidario de que se desarrolle e impulse la zona agrícola deltaica "de una forma sostenible y reduciendo la huella de carbono". Soler recuerda que el territorio "compra hortalizas fuera, cuando se podrían producir aquí" Pero, pese a las dificultades -y a amenazas como la ampliación de las ZEPA- la payesía lucha por su supervivencia, algo encomiable. "Hay que valorar el esfuerzo que está haciendo el sector primario en nuestro territorio, ya que se ven afectados por las construcciones de carreteras y son los primeros en sufrir las restricciones de agua", destaca el presidente comarcal de PIMEC.