Después de una década de espera, por fin se reinician las obras de la conexión entre la autovía del Baix Llobregat (A-2) y la autopista Pau Casals (C-32), en Sant Boi, una nueva autovía que se conocerá como B-25. Ya se han colocado los primeros paneles informativos, aunque los tabajos serán más visibles en agosto, cuando también se programarán algunas restricciones de tráfico . El proyecto incluye ocho actuaciones complementarias y un carril bici paralelo a la autovía. Las obras durarán dos años y se minimizará el impacto en la circulación,
Por fin. El reinicio de las obras de la conexión entre la autovía del Baix Llobregat (A-2) y la autopista Pau Casals (C-32) a su paso por Sant Boi, que se denominará B-25, ya es una realidad. Ha habido que esperar una década para que se vuelvan a ver en el lugar trabajadores, máquinas y los primeros paneles informativos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma).
Se trata de los trabajos preliminares previos, porque los trabajos en serio –por volumen e impacto- comenzarán a ser visibles en agosto. Pero algo es algo, porque supone el principio del fin de la espera por una vital variante que debería haberse estrenado coincidiendo con los Juegos Olímpicos de Barcelona’92.
El Mitma ha anunciado este martes -en pleno ‘sprint’ final de la campaña electoral- que la construcción del esperado vial de 2,26 kilómetros que deberá acabar con la insufrible congestión de la comarcal C-245 a su paso por Sant Boi (más concretamente en la rotonda de la Parellada) ha pasado de las palabras a los hechos. En paralelo, el ministerio ha formalizado la inyección de 65,83 millones de euros avala el proyecto.
Paneles informativos
Para que los conductores que transiten por la C-245 sean conscientes de la buena nueva viaria, fuentes ministeriales han confirmado que ya se ha colocado los primeros paneles informativos anunciando el proyecto y las características técnicas de las obras, justo en el interior de la rotonda de la Parellada y bien visibles para los automovilistas.
Esta primera señalética es la antesala de la que tendrá que ubicarse en agosto cuando comiencen las restricciones en la C-245 para permitir la retirada de las grandes columnas inacabadas –perfectamente visibles desde la comarcal- y que durante esta última década han simbolizado el olvido institucional del proyecto, según han avanzado fuentes municipales. Estos trabajos s ehabn progranmado justamente para el qmes que viene aprovechando que se reduce notablemente el tráfico en la C-245 debido a las vacaciones.
Ocho actuaciones complementarias
La autovía B-25 está concebida como la suma de ocho actuaciones complementarias:
-El tronco central, entre los términos municipales de Sant Boi y Cornellà, que enlazará la A-2 con la autopista C-32 (antigua A-16, que es como la denomina el Mitma), la comarcal C-245, la carretera BV-2002 y la trama urbana de Sant Boi.
-El nudo de Cornellà, que duplicará la capacidad del ramal de acceso desde la A-2 al centro de la ciudad.
-El nudo de Sant Boi Norte (Ciutat Cooperativa) que habilitará un acceso directo a la BV-2002 desde la nueva autovía y, por tanto, a la ‘Cope’.
-El enlace Sant Boi Sur, que conectará la C-32 con el polígono industrial de Les Salines en Sant Boi.
-La mejora del nudo de la C-32 con la C-31c (que une la carretera del Prat de Sant Boi con la autovía de Castelldefels), lo que permitirá numerosos movimientos del trafico local.-El enlace directo con el polígono industrial Mas Blau de El Prat y la variante de la pata sur de la Ronda de Dalt (C-32b), que abrirá una nueva entrada a la trama urbana pratense.
-La finalización del vial del Centro Direccional de El Prat, que saltará al lado mar de la C-32
-El enlace directo –con dos carriles por sentido- desde el arranque de la B-25 y la salida 602 de la Autovía del Baix Llobregat hasta la glorieta de las ‘ovelletes’ en Sant Vicenç dels Horts, que regula el tráfico hacia esta localidad, Torrelles de Llobregat (BV-2005) y Santa Coloma de Cervelló (BV-2002). El nuevo vial evitará la rotonda, lo que hará más fluido el tráfico en un punto que se colapsa en las horas punta.
Carril bici en paralelo
El proyecto de la B-25 forma parte también del programa Estrategia Estatal por la Bicicleta, lo que de facto supone la construcción de un carril bici de 750 metros de longitud y 3 metros de anchura que discurrirá en parelelo a la autovía desde la estación depuradora (ETAP) de Sant Joan Despí hasta la rotonda de la Parellada, en Sant Boi.
Obras menos molestas
Las obras está previsto que se prolonguen durante dos años e incluyen mejoras que harán que sean menos molestas para la ciudadanía -y en especial para los conductores- de lo previsto inicialmente, porque minimizarán el impacto en la circulación (muy densa en toda la zona afectada por los trabajos) y prácticamente prescindirán de los cortes de tráfico.