El Ayuntamiento de Cornellà solicita a la Generalitat que analice si las escuelas de infantil y primaria pueden convertirse en guarderías debido al aumento de la demanda. También pide financiación para garantizar la universalidad y gratuidad del servicio de escolarización de 0 a 3 años. En caso de incumplimiento, se estudiarán acciones judiciales. Además, se destaca la falta de inversión en educación infantil por parte de la administración competente.
El Ayuntamiento de Cornellà ha solicitado a la Generalitat que analice si las aulas y espacios disponibles en las escuelas de infantil y primaria de la ciudad son adecuados para convertirse en plazas de guardería para el próximo curso. Esto se debe al aumento de la demanda de plazas de guarderías de I1 (aula de 1 a 2 años) e I2 (aula de 2 a 3 años) registrado este año. Con esta medida, se busca garantizar la verdadera universalidad de la educación infantil, tal como se le atribuye a sus competencias. La decisión fue tomada durante el Pleno municipal celebrado el miércoles 29 de noviembre.
La propuesta de trasladar esta iniciativa a la Generalitat ha sido presentada por el consistorio, ya que considera que es la forma más rápida y efectiva de abordar el aumento de la demanda y evitar que ningún niño se quede sin plaza o en lista de espera en el próximo curso. Para el gobierno municipal, la universalidad es fundamental para garantizar el acceso a la educación en todas sus etapas y asegurar la equidad y fortalecer la cohesión territorial. El alcalde de Cornellà, Antonio Balmón, ha destacado que "además de proporcionar una educación enriquecedora y estimulante durante una de las etapas más importantes del aprendizaje y la vida de los niños, las guarderías tienen como objetivo brindar un servicio a las familias trabajadoras de la ciudad que les permita conciliar su vida familiar con su vida laboral, especialmente en momentos económicamente inciertos como los que estamos viviendo hoy en día".
A pesar de no ser obligatoria, el Ayuntamiento ha dedicado muchos esfuerzos para ofrecer la mayor cantidad posible de plazas en la primera etapa educativa. Cornellà ha creado ocho centros infantiles municipales, una en cada barrio, formando así una amplia red. Sin embargo, la ciudad no dispone de guarderías gestionadas por la Generalitat. Además, la capacidad de crecimiento de la red municipal está limitada logísticamente, lo que dificulta enormemente garantizar la universalidad de esta etapa educativa desde el gobierno local.
Aumento de plazas pero sin planificación
Cuando muchas familias de Cornellà intentaron matricular a sus hijos en las guarderías para el curso 2023-2024, se hizo evidente que no podrían acceder a una plaza. La Generalitat decidió unilateralmente implementar la gratuidad de la I2 sin asegurar que todos tuvieran acceso, lo que ha generado una demanda adicional que no se ha solucionado aumentando la oferta de plazas. El incremento de inscripciones ha llevado al Ayuntamiento de Cornellà a tener que gestionar rápidamente las circunstancias para ampliar el número máximo de plazas. Para lograr esto, han adaptado espacios que se utilizaban para finalidades educativas complementarias, lo que ha resultado en un aumento de la oferta de 612 a 641. Por ahora, todavía hay 137 familias en lista de espera. Concretamente, se han creado veinte plazas en la E.B. Mag Maginet para niños de 2 a 3 años, y nueve plazas en la E.B. Linda Vista, para niños de 1 a 2 años.
Considerando la necesidad de la gratuidad de la educación infantil, el consistorio insiste en que la Generalitat debe realizar una planificación adecuada y proporcionar suficiente financiación para avanzar hacia la universalidad y gratuidad del servicio. Además, ha solicitado que la Generalitat invierta en módulos y en contratar a personal para crear plazas en guarderías. En caso de incumplimiento, se estudiarán acciones judiciales contra el departamento de Educación de la Generalitat por su inactividad.
Falta de inversiones en Educación Infantil
Un ejemplo de la falta de inversión en las guarderías por parte de la administración competente en la ciudad es la ausencia de plazas de titularidad de la Generalitat de Cataluña, una política que ya se ha dado anteriormente, según el Ayuntamiento. Durante los años 2012 y 2015, la Generalitat de Cataluña redujo las aportaciones económicas a las guarderías, lo que resultó en una pérdida de ingresos que el consistorio asumió con el objetivo de no afectar a las familias. En este caso, en 2017, la justicia respaldó al Ayuntamiento y obligó al Gobierno de Cataluña a indemnizarlo con 2.528.834,48 euros.