Investigadores del Hospital Universitari de Bellvitge y el IDIBELL han logrado resultados excelentes en el tratamiento de trasplante renal al ajustar las dosis del inmunosupresor tacrolimus mediante un algoritmo personalizado. El estudio ha demostrado que este enfoque mejora la eficacia del medicamento y reduce los efectos adversos. Los investigadores sugieren que este método podría ser adoptado por otras unidades de trasplante renal, marcando el inicio de la medicina personalizada en este campo.
Investigadores del Hospital Universitari de Bellvitge y el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) han logrado demostrar excelentes resultados en el tratamiento de pacientes de trasplante renal, obtenidos al ajustar las dosis del inmunosupresor tacrolimus mediante un algoritmo que tiene en cuenta las características individuales de cada paciente. Este hito ha supuesto, según un estudio publicado en la revista Kidney International, el primer paso hacia la implementación de la medicina personalizada y de precisión en trasplante de riñón.
Actualmente, el único criterio para establecer una dosis inicial de tacrolimus, con tal de evitar el rechazo de este inmunodepresor, es el peso corporal del paciente. Sin embargo, este criterio resulta insuficiente para determinar la dosis óptima, por lo que frecuentemente se ajusta posteriormente, basándose en la experiencia empírica del médico y siguiendo el sistema de ensayo y error. Por lo tanto, durante este procedimiento no se tiene en cuenta los efectos que puede tener la administración del tacrolimus en cada persona ni el riesgo inmunológico individual, así como los efectos adversos que se pueden producir en cada paciente, ni la calidad del riñón del donante. Además, tampoco se suelen tener en consideración factores genéticos, que pueden incluso hacer necesaria una dosis hasta dos veces mayor que otra para producir los mismos efectos.
Las conclusiones que han sacado el equipo de investigadores del Hospital de Bellvitge es que cada paciente es un mundo, por lo que hay que tener en cuenta muchísimos factores, más allá del peso corporal, para adaptar la administración del inmunodepresor a cada uno de ellos, individual y personalmente. El estudio realizado por estos investigadores se ha centrado en la evaluación de la eficacia de un algoritmo validado para determinar la dosificación adecuada. Dicho algoritmo tiene en cuenta factores como la edad, el hematocrito (proporción de glóbulos rojos en sangre) y ciertos indicadores genéticos presentes en cada individuo. También se considera el conocimiento previo sobre cómo estos parámetros afectan la respuesta del fármaco.
Los estudios de los investigadores de Bellvitge
Para la realización de este estudio, los investigadores han llevado a cabo ánalisis en el Hospital de Bellvitge entre 2018 y 2020, en los que han involucrado a 90 pacientes sometidos a trasplante de riñón. Se tomaron como objeto de estudio dos grupos: pacientes que siguieron un nuevo algoritmo de dosificación, y pacientes que recibieron la dosificación estándar basada únicamente en el peso corporal. Para el estudio, se ha comparado específicamente el efecto del fármaco en cada uno de ellos.
Pasados 5 días desde el trasplante, se observó que el 55% de los pacientes del primer grupo (dosificación personalizada) habían logrado alcanzar la concentración mínima necesaria de tacrolimus, y habían alcanzado el nivel terapéutico deseado. En cambio, en el segundo grupo (dosificación estándar), solo el 21% había logrado alcanzar la concentración mínima necesaria de tacrolimus, y además requería unos 10 días de promedio para alcanzar el nivel deseado (el doble que el primer grupo). Además, los pacientes con dosificación individualizada experimentaron menos cambios en la dosis y mostraron una menor variabilidad entre ellos en cuanto a la presencia efectiva del fármaco.
Los efectos adversos de una dosificación estándar
En los primeros días después de un trasplante renal, es común que los pacientes tratados con tacrolimus estén expuestos en exceso o en defecto a este medicamento, lo que incrementa el peligro de complicaciones. La posibilidad de lograr niveles adecuados más rápidamente podría resultar en una disminución del riesgo de rechazo y de los casos de toxicidad derivada del fármaco.
El estudio ha sido realizado por varios médicos especialistas del Servicio de Nefrología del Hospital de Bellvitge, liderado por el Dr. Josep M. Cruzado, junto con la colaboración de la Dra. Núria Lloberas, investigadora del Servicio de Nefrología del Hospital de Bellvitge y autora principal del estudio. Además, han contado con el apoyo del Área de Bioquímica del Laboratorio Clínico del Hospital de Bellvitge y de la Unidad de Biofarmacia y Farmacocinética de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona. "Sería deseable que la mayoría de unidades de trasplante renal adoptaran la estrategia que hemos probado", ha destacado la Dra. Lloberas. Esta aproximación, que requiere únicamente un estudio farmacogenético previo al trasplante y la detección de algunas variables clínicas y analíticas, es relativamente fácil y económica.
Recepción positiva del estudio
Un comentario editorial en el mismo número de la revista Kidney International, ha elogiado el diseño y la ejecución del trabajo, y ha destacado que "puede marcar el inicio de la medicina de precisión en el trasplante renal", según los autores del artículo editorial. Además, estos autores han afirmado que "el trabajo realizado en Bellvitge señala el camino a seguir". Según ellos, este camino implica agregar nuevos parámetros al algoritmo para fortalecer su papel como guía en una terapia completamente personalizada.