El Ayuntamiento de Gavà ha adquirido el Centro Cultural mediante una compra al Obispado de Sant Feliu de Llobregat por 1,1 millones de euros. El edificio, cerrado desde 2020 debido a problemas estructurales, será restaurado y utilizado nuevamente para actividades culturales y cívicas. La alcaldesa ha expresado su alegría por la recuperación del edificio y ha resaltado su significado para la comunidad.
Este viernes 22 de diciembre, Gavà ha incorporado al Centro Cultural a su patrimonio. Mediante una firma de la compraventa del inmueble entre el Ayuntamiento de Gavà y el Obispado de Sant Feliu de Llobregat, se ha dado el primer paso para poder recuperar los usos culturales y cívicos de la equipación de la calle de Sarrià. El Ayuntamiento abonará al Obispado un total de 1,1 millones de euros en cuatro años para cerrar la operación. Esta transacción será gestionada dentro del presupuesto municipal ordinario.
"Es un gran logro para Gavà", ha expresado la alcaldesa Gemma Badia. "El Centro Cultural ahora pertenece a la ciudad: es un regalo de Navidad para la cultura y el ocio", ha añadido. Tras 65 años en los que generaciones y generaciones han construido un vínculo emocional con el Centro, la ciudad de Gavà ha podido recuperarlo. La historia de este espacio la han creado todas las personas y entidades que han organizado actividades estrechamente ligadas a la vida cultural, asociativa, recreativa, parroquial y eclesial de la ciudad. Por ello, la alcaldesa se ha conmovido de alegría al saber que este espacio recuperará su esencia como centro cultural, algo que muchos gavanenses recordaban con nostalgia.
El Centro Cultural se ha mantenido cerrado desde 2020, debido a la mala conservación del edificio y el riesgo de desprendimiento de los techos, que podrían poner en peligro la integridad de las personas y entidades usuarias. La parcela que ocupa tiene una calificación urbanística vigente de equipación cultural y educativa, y seguirá siendo así. El Ayuntamiento empezará a definir el plan de usos de la equipación de manera consensuada y participada con el tejido asociativo, y a redactar el proyecto de restauración del edificio, una vez formalizada la compraventa. Josep Maria Domingo, vicario general del Obispado de Sant Feliu de Llobregat, ha expresado su satisfacción con el acuerdo, alegando su "vocación de dar el mejor uso a esta equipación y continuar la historia de tantos años, con sus actividades culturales, festivas y, al final, educativas”.
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