Más de 60 estudiantes y vecinos participaron en la recolección de naranjas amargas en Viladecans, como parte del Pacto por el Clima. Las naranjas se utilizarán para hacer mermelada a través del proyecto Urban(eat)a. Además, Viladecans promoverá productos locales y organizará talleres de cocina para aprovechar los alimentos de temporada. El Pacto por el Clima busca establecer acuerdos para actuar frente a la emergencia climática.
Este sábado 24 de febrero, más de 60 estudiantes del Instituto de Sales y vecinos de la zona han participado en la primera espigada de naranjos amargos. Gracias a su cooperación, han logrado recoger casi mil kilogramos de fruta de todos los árboles del barrio.
Esta actuación forma parte del Pacto por el Clima de Viladecans, que ha estado impulsando acciones para aprovechar los alimentos desde el curso pasado y evitar el desperdicio de comida. La actividad ha contado con el apoyo de la Fundació Espigoladors y la implicación de la asociación vecinal y el Casal Barri de Sales, así como otras entidades del municipio.
Como son naranjas amargas, no se recomienda consumirlas directamente, así que se usarán para hacer mermelada. La Fundació Espigoladors se encargará de elaborar la mermmelada, gracias al proyecto Urban(eat)a, financiado por la Generalitat. Las naranjas recogidas este sábado se llevarán al obrador de Es-imperfect, la empresa de inserción laboral y transformación alimentaria de la Fundació. Una vez allí, los trabajadores de la Fundació Espigoladors se encargarán de elaborar la mermelada y devolverla para su consumo.
El Pacto por el Clima de VIladencas
En los meses de junio y julio, Viladecans promoverá productos de temporada del su campo local, como el calabacín y el tomate, siguiendo el Pacto por el Clima. Además, la ciudad organizará talleres de cocina para aprender técnicas y recetas que permitan aprovechar estos alimentos. El Pacto por el Clima se ha propuesto establecer acuerdos firmes entre los agentes locales para actuar frente a la emergencia climática.
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