Viladecans liderará la lucha contra el abandono escolar en la Unión Europea

Lo local es global”, como decíamos los del baby-boom cuando éramos jóvenes allá por los años noventa del siglo pasado.La globalización fue entonces un escenario optimista y repleto de esperanza. Hoy, el repliegue nacional parece ser la respuesta a las grandes incertidumbres globales, pero algunos se empeñan, afortunadamente, en mirar al mundo con las luces largas puestas.

Es el caso de Viladecans, que se ha propuesto elevar a la Unión Europea una demanda: el abandono escolar cero. Esta ciudad del Baix Llobregat aprovechará su presidencia al frente de la Red Estatal de Ciudades Educadoras para encumbrar hasta los despachos de Bruselas la necesidad de que todos los estados miembros se impliquen en la tarea de evitar que ningún adolescente europeo abandone antes de tiempo las aulas. ¿Cómo lo hará? “La fórmula y procedimiento para llevar la iniciativa hasta Europa dependerá del ministerio, pero en todo caso nuestro objetivo específico será dar a conocer esta misión, elaborar un plan de acción conjunto, y contribuir a que todas las ciudades educadoras impulsen medidas para incrementar el número de jóvenes con titulación de estudios postobligatorios”, responde el alcalde Carlos Ruiz. El objetivo final será el de presentar a la Comisión Europea “esta experiencia municipalista española” y que ayude a establecer una política común en el continente europeo.

Impronta contra el abandono

Viladecans está decidida a marcar con su impronta de políticas contra el abandono la presidencia de la Red de Ciudades Educadoras, responsabilidad que durará dos años. El abandono escolar cero es uno de los propósitos que la ciudad priorizó en el marco de la Agenda 2030. “Sí es una de nuestras prioridades”- afirma Carlos Ruiz- “porque se trata de mejorar la educación de nuestros niños niñas, luchando contra el fracaso escolar. En los últimos años hemos invertido mucho en innovar, mejorar las instalaciones y digitalizar nuestros centros escolares, colaborando con la Generalitat y contando con el esfuerzo del profesorado, para conseguir que ahora estemos por encima de la media catalana de éxito escolar y tengamos cerca de la mitad del porcentaje de abandono escolar”.

A la Fundació Bofill, entidad de referencia en temas educativos en Cataluña, no le ha pasado inadvertido el trabajo que Viladecans ha realizado durante los últimos años. En este sentido, la teniente de alcalde y concejal de Cultura, Gisela Navarro, participó recientemente en una mesa de análisis organizada por la Bofill para crear también una red de ciudades catalanas contra el abandono prematuro.

Fórmulas para atraer a los que se fueron

Viladecans ha conseguido mantener a raya el abandono escolar y crea periódicamente fórmulas para atraer de nuevo a clase a los que se fueron; o evitar que traspasen la puerta de salida del instituto aquellos alumnos con más riesgo de abandonar. Uno de los proyectos más recientes es Escola de Noves Oportunitats, que brinda una atención personalizada a los estudiantes de secundaria que más dudas albergan sobre su continuidad académica.

La iniciativa, que incluye juegos de rol, se lleva a cabo este curso en las instalaciones de Can Calderón. Otra de las iniciativas en marcha en Viladecans es la de crear un programa propio de becas para garantizar la entrada en la universidad a jóvenes con dificultades económicas. Las cosas a partir de ahora deberían ser más fáciles para desplegar acciones más ambiciosas contra el abandono escolar prematuro. El govern de la Generalitat ha accedido a cumplir una de las grandes demandas de los municipios: compartir con ellos los datos sobre abandono. Ha sido una reclamación histórica de la Diputación de Barcelona con la esperanza que ciudades y pueblos de la provincia puedan diseñar fórmulas eficaces de retorno a las aulas.

Decenas de experiencias municipales

El dossier Municipis que no abandonen, elaborado por los sociólogos Alejandro Montes y Andrea Jover, vinculados a la Universitat Autónoma de Barcelona, recoge decenas de experiencias municipales contra el abandono. “Y nos han quedado muchas de estas experiencias fuera del informe por falta de espacio”, se lamentaba durante la presentación del estudio Alejandro Montes. El sociólogo elogia así el esfuerzo histórico de “los municipios catalanes para hacer frente al abandono prematuro”.

Cataluña ha logrado reducir la tasa de abandono escolar del 17% al 14%, pero continúa ligeramente por encima del porcentaje de alumnos que marchan de clase en el conjunto de España. Éste es del 13,6%. En todo caso, demasiado lejos de las cifras de la Unión Europea. La media en Europa es del 9,6%