El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha licitado las obras de mejora de la conexión entre la autovía A-2 y la B-40, un enlace que se produce entre los municipios de Abrera y Esparreguera. El proyecto se ha licitado por 37,1 millones de euros (IVA incluido).
En febrero de este año ha empezado a funcionar el tramo de la B-40 entre Olesa y Viladecavalls, que a su vez conecta el municipio de Terrassa con la autovía A-2. A raíz de ello, ha aumentado considerablemente el tráfico en este enlace de las carreteras, así que el Ministerio ha considerado necesario realizar trabajos de mejora en la infraestructura viaria.
El acceso a la B-40 desde la A-2 en dirección Terrassa (sentido Barcelona) se ampliará con un segundo carril. En el sentido opuesto (dirección Lleida), la B-40 mejorará el trenzado del acceso a la A-2. Otras de las principales actuaciones de las obras son la mejora de la incorporación de la carretera C-55 a la A-2 y la creación de un nuevo ramal de transferencia entre la vía de servicio de la A-2, en torno al P.K. 583.
Actuaciones en el término municipal de Esparreguera
El proyecto incluye también la construcción de una pasarela peatonal sobre la autovía A-2 en el término municipal de Esparreguera. Además, se trabajará en la prolongación del carril de acceso a la carretera B-40 desde la A-2 y la mejora del ramal de entrada del enlace de Esparreguera Sud. Del mismo modo, se ampliará la capacidad de la calzada A-2 (sentido Lleida) en los 581 Esparreguera Sur y 580 Esparreguera Centro. Los trabajos incluyen también la mejora del ramal de entrada al enlace 581 y la mejora de los carriles de cambio de velocidad del enlace 580.
Aprovechando el proyecto, el Ministerio ha impulsado un estudio hidráulico para definir las actuaciones necesarias para proteger la infraestructura viaria de las posibles lluvias en el entorno del Torrent del Mal. Estas actuaciones deberían proteger la carretera de cualquier daño causado por las lluvias máximas alcanzables en los próximos 100 años.