Del jueves 19 al domingo 22 de septiembre, Cornellà celebrará una nueva edición del festival de cine B-RETINA, en el Auditori Sant Ildefons. Tras descubrir las estrellas del cartel de este año, los organizadores han revelado otra de las sorpresas de la edición: dos títulos “transgresores” y “radicales” de cine sexual de Serie B.
El primero de ellos, Mamántula (2023) de Ion de Sosa, se proyectará el jueves 19 de septiembre. Narra la historia de una araña extraterrestre ‘travestida’ como un humano, hambrienta de sexo, que llega a un presente distópico para coleccionar amantes en su telaraña. La obra combina horror y sensualidad, “a través de una mezcla de estilos, que combina los universos de David Lynch y John Waters con la estructura de un capítulo de Expediente X”, ha explicado David Bravo, responsable de comunicación del Festival.
Mamántula ha ido siempre asociada a la controversia, causando revuelo en varios festivales de cine, como el de Sitges o el de San Sebastián. “Es uno de los títulos más salvajes del cine español de los últimos años”, ha añadido Bravo. Tras tan solo un año desde su estreno, “ya se ha convertido en toda una obra de culto”.
La 'perturbadora' Sexión Continúa
El otro provocador título de esta edición es Sexión Continúa (2024), el nuevo proyecto de Marta Montes (en colaboración con Miguel Guiraldo), que podrá verse en el Auditorio el sábado 21. Según explican sus creadores, la película muestra una serie de breves episodios “crudos, procaces y cautivadores”, unidos a modo de “collage sensorial” que llevan al espectador a cuestionarse y afrontar sus más profundas perversiones. Estos breves episodios se enlazan para construir una biografía de su protagonista, Martanuelle, como “un viaje cinematográfico inusual” a través de la psique humana. La película está prohibida para menores de 18 años, debido a su contenido explícito que podría llegar a herir la sensibilidad de sus espectadores.
Lo más sorprendente de la película es su producción, de la mano de 5G Films: el proyecto ha visto la luz con tan solo 666 euros en el presupuesto y un teléfono móvil como único equipo cinematográfico. A pesar de los recursos limitados, la obra es “un testimonio del ingenio y la creatividad de sus creadores”, logrando ha combinar en poco más de una hora elementos del cine expresionista alemán, el film noir, el cinema verité y la alta comedia, con un toque retrofuturístico.
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