Este otoño vuelve el festival de cine más escalofriante a Molins de Rei con un aire ‘rural’. Del 8 al 17 de noviembre, la ciudad celebrará la 43.ª edición del TerrorMolins, que este año homenajeará los 50 años del estreno de La matanza de Texas de Tobe Hopper, uno de los títulos más revolucionarios e icónicos del género.
Esta efeméride ha sido la inspiración detrás del cartel de este año, según han revelado los organizadores del festival. El cineasta Paco Ruiz ha vuelto a ilustrar el festival con un diseño que refleja la estética de los años 70, una década revolucionaria para la ficción de terror. A través de imágenes del mundo de los cómics y una fuerte influencia de los carteles de cine de la época, Ruiz ha querido reflejar el espíritu vibrante y rebelde de los 70, a través de unos tonos apagados y sombríos que logran erizar la piel.
Con este diseño, Ruiz ha plasmado la importancia e influencia de grandes títulos terroríficos como La matanza de Texas, que marcaron para siempre el cine de terror. La figura central del cartel, que juega el papel de heroína, es Ellen Ripley de Alien; según el mismo Ruiz, representa “una mujer capaz de dejar atrás el estereotipo de ‘damisela en apuros’, que con gran valentía asume un rol de líder”.
Un pequeño vistazo a la programación
Además del cartel de la edición, los organizadores han revelado las siete primeras películas de la cartelera del Festival, que se proyectarán en el Teatro La Peni de Molins. Desde Irlanda llega Oddity, de Damian McCarthy, una película que explora la obsesión de una médium ciega tras el asesinato de su hermana.
De los Países Bajos, Krazy House, que comienza con un toque cómico e inocente y desemboca en una home invasion (‘allanamiento de morada’) a la vez violenta y llena de humor. La película está protagonizada por Nick Frost, una de las grandes caras del cine de terror. Otro rostro conocido que pasará por la pantalla del La Peni es el de Samara Weaving, protagonista de uno de los estrenos terroríficos más esperados del año, la producción estadounidense Azrael, de E.L. Katz. La película guía al espectador a través de un viaje hacia los infiernos en una lucha por la supervivencia entre cultos secretos y criaturas del inframundo.
Las dos estrellas del cartel: Corea del Sur y Francia
La programación de este año trae grandes títulos del cine de terror francés y surcoreano, dos países que están construyendo una sólida cartelera terrorífica. Desde Corea llegan dos títulos de ‘terror rural’, Exhuma y Handsome Guys. La primera narra la historia de una chamana que debe cumplir una misión en un lugar remoto del país y que termina enfrentándose a traumas y espíritus malvados. El otro título es una comedia negra que sigue a dos amigos hasta una casita rural aislada y acechada por una presencia oscura y extraña.
Desde Francia, David Moreau trae MadS, un viaje en tiempo real en un mundo de fiesta, droga, sangre y pesadillas. También francesa es la producción Animale, de Emma Benestan, que infunde el terror en una historia de coming-of-age y se ha convertido en un referente del cine femenino francés.