Durante las celebraciones de la Fiesta Mayor de Molins de Rei, los agentes de los Mossos d’Esquadra de la Región Policial Metropolitana Sur han dirigido un dispositivo específico de refuerzo de la seguridad, en colaboración con la Guardia Civil de Molins y la Policía Nacional. Esta tarea se ha centrado especialmente en la prevención de la tenencia de armas en el espacio público, así como su persecución y sanción en el caso de identificar algún portador.
El trabajo conjunto de estas tres unidades policiales se ha llevado a cabo, sobre todo, en aquellos espacios en los que ha incrementado recientemente el número de incidentes debidos a la tenencia de armas. Según los datos de seguridad de la Región Metropolitana Sur, entre los meses de enero y agosto de este año, la policía ha intervenido hasta 880 armas en el territorio. Estas cifras demuestran una tendencia ascendente en la tenencia de armas en el territorio durante los últimos años.
Como respuesta a esta tendencia, en el año 2023 Cataluña activó el plan estratégico ‘Espacio Público Libre de Armas’, que ha ido aumentando gradualmente su intensidad desde su primera aplicación. En este mismo Plan se integra una herramienta policial que ha sido la base del dispositivo de Molins de Rei, el ‘Plan Daga’. A partir de una serie de controles preventivos, esta herramienta pretende reforzar la protección de los espacios públicos y las calles por las que suelen pasar un mayor número de portadores de armas blancas que supongan un riesgo para la seguridad de los ciudadanos.
Refuerzo de los controles de alcoholemia y de tenencia de armas
Durante las noches de las fiestas de Molins, los agentes de este dispositivo se han encargado de responder a las denuncias por tenencia de armas prohibidas. En las noches del viernes y el sábado, los agentes han recibido un total de 14 denuncias. Aunque la función de este dispositivo era fundamentalmente preventiva, los agentes han llegado a detener a una persona por un delito de lesiones y a otra por atentado a los agentes de seguridad.
Durante las mismas noches (viernes y sábado), los agentes han realizado, además, controles de alcoholemia y drogas en las principales vías de acceso al municipio. Durante esas dos noches, la afluencia de vehículos suele dispararse por los conciertos que se organizan como parte de las fiestas, ya que suelen atraer a ciudadanos de otras poblaciones en el entorno. Por ese mismo motivo, el dispositivo ha trabajado en un refuerzo de la seguridad en carretera: los agentes de tráfico han llegado a realizar hasta 160 lecturas de alcoholemia y drogas. De estas, solo 14 han dado positivo; uno de ellos ‘positivo penalti’, con una tasa de alcohol en aire superior a los 0,60 mg/l.
Unidades del dispositivo
En este dispositivo han participado agentes de los Mossos d’Esquadra de las unidades de seguridad e investigación de la comisaría de Sant Feliu, del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), de la Brigada Móvil (BRIMO), de la Unidad de Drones (UDRON), de la Unidad Canina, del Área Regional de Tráfico (ARTE), Unidad de Policía Administrativa (ZARPA) y otras áreas y unidades de la Región Policial Metropolitana Sur. Los Mossos han trabajado en conjunto con la Guardia Urbana de Molins de Rei, la Policía Nacional, el Servicio de Emergencias Médicas (SEM), los Bomberos, la Cruz Roja, Renfe, Protección Civil y varios servicios de seguridad privada.
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