Los torneos de blitz (ritmo rápido), previos a la primera ronda de un abierto internacional, son una moneda al aire, tanto en lo organizativo como en términos deportivos. Para los organizadores, porque es una forma de añadir “condiciones” (es decir, un pago por la participación del ajedrecista en el evento principal) y, para los jugadores, porque depende mucho de los gustos particulares y de la rutina de torneo que se autoimpongan. Hay ajedrecistas a quienes les sirve para llegar a la primera ronda del torneo clásico en su pico máximo de fuerza, con las variantes de apertura que hayan preparado frescas y el cerebro predispuesto al cálculo extremo; otros, en cambio, acusarían desgaste, tanto físico como emocional, y prefieren centrarse sólo en el torneo grande, por lo que evitan sobresfuerzos a pesar de que la remuneración económica sea interesante. Así, aunque este año hemos tenido una participación menor que en temporadas anteriores (14 maestros participantes), a muchos les compensa la semana y media de competición. En este sentido, es pertinente tener en cuenta que el último clasificado del blitz se ha embolsado 300 euros.
Además, el atractivo de ver a las estrellas del torneo compitiendo a ritmos rápidos la tarde previa a la gran cita es indudable, pues nos permite evaluar el tono de preparación en el que acuden a la cita en Sant Boi. Como extra, la jornada de blitz tiene un tono lúdico que les ayuda a liberarse de cierta tensión pretorneo, una circunstancia no menor cuando se trabaja bajo presión. ¿Sería una idea aprovechable para otras labores de alta exigencia? Estoy pensando, si me permiten la digresión, en profesionales de la cirugía, por ejemplo.
Entre los presentes hemos podido intercambiar unas palabras con el representante del medio de comunicación Chessbase india Niklesh Jain, quien nos ha confirmado su estancia a lo largo de todo el torneo y la importancia que este evento tiene en su país. También hemos tenido la ocasión de hablar con Chan Kim Yew, quien además de ser un fuerte jugador y participante en El Llobregat Open Chess Tournament, tomó imágenes del blitz para su canal Malaysian Chess.
En términos deportivos, se impuso el iraní Madhi Gholami Orimi (6 p.), seguido en la clasificación por el húngaro Adam Kozak (5,5) y por el español Julen Arizmendi (4,5). Cabe destacar que para el ajedrecista iraní este torneo ha supuesto su debut como gran maestro, pues obtuvo la titulación en octubre.