El Informe anual de transparencia de la Sindicatura de Greuges de Catalunya ha otorgado la calificación máxima al Ayuntamiento de Viladecans en todos los parámetros, un reconocimiento que solo han conseguido seis consistorios de toda Cataluña. De hecho, es el único municipio de más de 50.000 habitantes del Baix Llobregat en alcanzar esta valoración, y ha superado en un 10% la media catalana en todos los indicadores obligatorios.
A través de este Informe, la Sindicatura evalúa la aplicación de la Ley 19/2014 del 29 de diciembre de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno de las administraciones catalanas, con los datos de 2022. Este estudio, realizado a partir de un test del solicitante oculto, analiza la aplicación de todos los elementos formales de la Ley, así como las herramientas derivadas de estas normas, teniendo en cuenta factores como la accesibilidad o la inclusividad.
Este año, además, ha valorado también los portales web municipales, centrándose en el cumplimiento de las obligaciones de publicidad activa. Así, a través del análisis exhaustivo de varios parámetros, la Sindicatura pretende que las administraciones catalanas identifiquen las áreas específicas que requieren una mejora.
El camino hacia el 100%
Y eso mismo ha hecho el consistorio de Viladecans. Tras un primer informe provisional en 2021 que le otorgaba una nota inicial del 83%, el Ayuntamiento ha trabajado por corregir y perfeccionar la información de su sede electrónica y su Portal de Transparencia. Gracias a estas actuaciones de mejora, tras el correspondiente periodo de revisión y alegaciones, la Sindicatura le ha subido la nota al Ayuntamiento, que ha conseguido una calificación definitiva del 99,4%.
La teniente de alcaldía, Gisela Navarro ha celebrado este hito, que considera “fruto del trabajo de los últimos años”. Según la teniente, “el Ayuntamiento lleva casi diez años transformando sus herramientas de trabajo, su forma de informar a la ciudadanía y sus procesos, con el propósito de convertirse en una administración moderna”. Los resultados del informe corroboran, pues, que el Ayuntamiento ha trabajado por cumplir este desafío.
Seis criterios de evaluación
El baremo de evaluación del derecho de acceso a la información pública de Viladecans se ha calculado a partir de cinco atributos, que la han definido como una administración accesible; eficaz, resolutiva y de calidad; comprensible; garantista; actualizada, reutilizable e interoperable. Además, incluye una valoración adicional, que tiene en cuenta la capacidad del Ayuntamiento para brindar asistencia y asesoramiento a la ciudadanía en los trámites municipales o para garantizar el acceso a información sobre los mismos. Así, el Informe de la Sindicatura ha otorgado a la administración de Viladecans una calificación del 100% en estos seis criterios.
Tras estas actuaciones de mejora, el Ayuntamiento ha conseguido subir su calificación considerablemente en todos los criterios del baremo, incluso aquellos más complejos. “Los ítems que se deben cumplir son complejos técnicamente”, ha explicado Navarro, “por eso hemos abordado cada uno de ellos, con una mejora continua, hasta poder alcanzar el 100% en cada uno”.
Una mejora respecto al informe de 2021
El Ayuntamiento ha conseguido mejorar considerablemente en el apartado de información actualizada y reutilizable (con una calificación del 75% en 2021 y del 100% en 2022), y en la valoración adicional (80% en 2021; 100% en 2022). Además, ha obtenido una calificación del 100% en uno de los criterios más difíciles de alcanzar, el reconocimiento por ser una administración garantista, por su aplicación de un modelo formal de resolución de trámites y comunicaciones municipales (es decir, a través de documentos oficiales, no simplemente correos electrónicos y llamadas), que garantiza la integridad, autenticidad y fiabilidad del consistorio. “Estamos muy satisfechos de haber alcanzado el máximo porcentaje”, ha concluido, “pero también somos conscientes de la complejidad”.
En conclusión, con esta calificación, la Sindicatura de Greuges considera que ningún Ayuntamiento del Baix, y prácticamente ninguno en toda Cataluña, atiende tan bien las peticiones ciudadanas de información como Viladecans.