El Hospital de Viladecans implementó una cirugía ambulatoria para reemplazo de rodilla, permitiendo que 30 pacientes regresen a casa el mismo día. La técnica minimiza el dolor y mejora la experiencia postoperatoria, con un seguimiento exhaustivo por parte del personal médico. Los resultados han sido muy satisfactorios.
Ya hace más de un año que el Hospital de Viladecans ha puesto en marcha su innovadora técnica de cirugía ambulatoria sin ingreso para operaciones de reemplazo total o parcial de la rodilla. Desde su debut, 30 personas han pasado por quirófano sin necesidad de guardar reposo ni pasar la noche en el Hospital, pudiendo volver a casa el mismo día de la operación.
Así lo ha relatado una de las pacientes del Hospital, Antonia Rodríguez, que sufre de artrosis, operada mediante este nuevo procedimiento a finales de enero de este año. “Sobre las 12h del mediodía salí del quirófano, y me hicieron dar unos pasos”, ha relatado la paciente, “después de comer, vino una fisioterapeuta, subí unas escaleras y sobre las 18h ya estaba en casa”. Apenas seis horas después de la operación.
Además de las ventajas de la rapidez y comodidad de este método, “las explicaciones previas a la cirugía son excelentes”, ha añadido la paciente. “Antes de la cirugía me informaron sobre todo el proceso al detalle, tanto sobre el funcionamiento de la operación como los posibles síntomas del postoperatorio”. Gracias a todas las recomendaciones de los profesionales del Hospital, la recuperación de Antonia ha sido más que favorable. “Todo ha sido muy sencillo”, ha explicado, “al llegar a casa, he ido haciendo todos los ejercicios que me recomendaron, con movimientos cada hora”.
Una experiencia más llevadera
Y el caso de Antonia no es singular, sino que la gran mayoría de los pacientes atendidos con estas cirugías sin ingreso están más que satisfechos con los resultados. De hecho, aseguran que el dolor postoperatorio es “aceptable” y “llevadero”, y que “repetirían la experiencia sin ingreso”.
Según ha informado el Hospital, desde su puesta en marcha, las complicaciones médicas han sido mínimas (y, en el caso de haberlas, han sucedido por factores que no se relacionan con la técnica quirúrgica). “Irse a casa el mismo día, siempre y cuando el paciente pueda tratarse adecuadamente fuera del Hospital, mejora completamente su experiencia”, ha apuntado el Dr. Juan Ramón Amillo, facultativo de Cirugía Ortopédica y Traumatología, “y disminuye el riesgo de infección hospitalaria”.
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Mínimo dolor
Uno de los objetivos primordiales de la técnica es minimizar el dolor del paciente durante todo el proceso, desde la operación hasta la recuperación en casa. Además de la técnica aplicada durante la cirugía, también es esencial la valoración previa de los profesionales de enfermería, un triaje básico para el éxito completo del procedimiento. Los enfermeros, además, hacen un seguimiento de los pacientes durante todo el proceso, tanto esta valoración inicial como durante y después de la operación.
Para ello, el Servicio de Anestesiología del Hospital de Viladecans aplica una técnica propia, la administración de anestesia raquídea y bloqueos periféricos. Esta metodología permite “un control multimodal de todos los componentes dolorosos”, ha explicado el Dr. Francisco Nebot, anestesiólogo del Hospital, “y así nos aseguramos de que la calidad asistencial es idónea y el paciente siente el mínimo dolor posible”.