La Fundació Santa Eulàlia i Sant Roc de L’Hospitalet lanza la campaña #RosaEterna, una iniciativa en la que hacerse un tatuaje contribuirá a que las personas mayores de la ciudad que no tienen a nadie al lado que pueda regalarles nada reciban una rosa en la Diada de Sant Jordi como manda la tradición. Con el apoyo del estudio Black Ship Tattoo Barcelona persigue recaudar 10.000 euros para que entre 500 y 600 ancianos sin compañía su flor en un día tan señalado y simbólico. Además, gracias a los tatus se va a promover la solidaridad intergeneracional.
La Fundació Santa Eulàlia i Sant Roc de L’Hospitalet acaba de poner en marcha una original iniciativa para que ninguna persona mayor de la ciudad, de las que vive sola o no tiene familia, se quede sin su tradicional rosa en la próxima Diada de Sant Jordi. En colaboración con los artistas de Black Ship Tattoo Barcelona, un estudio de tatuaje top a nivel europeo y con proyección internacional, todas las personas que hagan donaciones de más de 100 euros para la campaña #RosaEterna recibirán a cambio un rosáceo tatuaje en la parte del cuerpo que decidan. “Será como llevar la solidaridad en la piel”, explica Jofre Fuguet, Director Ejecutivo de la Fundació Santa Eulàlia.

Los diez tatuadores del estudio Black Ship Tattoo -con el gran Kike Esteras a la cabeza (quien ha plasmado su excepcional maestría en un exclusivo libro de diseños inspirados en esta icónica flor), cada uno de los diez con su particular estilo, grabarán en la piel de los donantes solidarios alguno de los 40 modelos de tatuajes de rosas creados ex profeso para la ocasión. Incluso, si quien aporta el donativo hace un ‘extra’ significativo, se podrá personalizar el tatu en colaboración con el artista elegido. Para poder participar no hay más que entrar en la web de la fundación (fsantaeulalia.org y hacer clic en el enlace https://www.fsantaeulalia.org/fes-la-teva-donacio/.
Siempre un obsequio a cambio
Las personas que no pueda hacer una aportación tan sustancial también podrán participar en la campaña, aunque recibirán otras contraprestaciones a cambio. Si se donan 10 euros, se obtendrá una bolsa RosaEterna de regalo y si se aportan 50 euros un print (ilustración gráfica) de la campaña. Quienes puedan estirarse un poco más y llegar hasta los 500 euros de aportación podrán disfrutar de “una experiencia Premium” que todavía no ha sido revelada.

La Fundació atiende a unas 3.500 personas mayores de L’Hospitalet, de las que “entre 500 y 600 no pueden recibir obsequios de nadie”, reconoce Fuguet. El objetivo de la iniciativa es que todas ellas puedan presumir en la Diada de Sant Jordi de su radiante rosa, como mandan los cánones, como el resto de ciudadanos. Para ello necesita recaudar unos 10.000 euros, que es la cifra mágica que la entidad se ha fijado como meta.
Un gesto solidario imborrable
El simbólico intercambio entre tatuajes y rosas se ha escogido porque un tattoo es imborrable. Así que cada gesto solidario dejará una marca en la persona que colabore igual de indeleble al paso del tiempo que la tinta. “La memoria puede ser frágil pero la solidaridad es eterna”, aseguran desde la Fundació Santa Eulàlia. Este es uno de los pilares de #RosaEterna.

Pero hay otros. Uno de ellos, no menos importante, es “romper estereotipos intergeneracionales” y que “los más jóvenes tengan un gesto hacia los más mayores y viceversa”, sintetiza Jofre Fuguet. Será una forma de los abuelos que, a veces, ven a las nuevas generaciones muy tatuadas con un cierto resquemor empiecen a percibir los tatuajes de otra manera. Y es que podrán comprobar por ellos mismo cómo grabarse una rosa en la piel por solidaridad puede ser también una forma de hacer feliz a alguien. Aunque sea de forma indirecta, con el metafórico gesto de que cada tatu de Black Ship se convierta en una rosa de Sant Jordi “de verdad” cuando la reciba una persona mayor que no esperaba el regalo, pues se creía olvidada del mundo.

Rosas por adelantado
Los que se atrevan a participar en esta “original, alentadora y diferente forma de sumar esfuerzos y ser solidarios”, como la define el Director Ejecutivo de la Fundació Santa Eulàlia i Sant Roc, deberán solicitar cita previa, elegir tatuador y desplazarse hasta el estudio, que está en Barcelona. Para que haya tiempo suficiente para que todos los que quieran tatuarse una rosa eterna puedan hacerlo sin problemas y sin hacer encaje de bolillos en sus agendas, la iniciativa se prolongará hasta algunos días después de la Diada. “La campaña ha empezado esta semana y durará un mes” y los diseños a elegir se irán subiendo a las redes sociales de forma gradual, corrobora Fuguet. Y las rosas auténticas se comprarán por adelantado para que nadie se quede sin una el día de Sant Jordi. “Queremos acercar un gesto de calidez y afecto a aquellos que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad”, explican desde la Fundació. Queda grabado a fuego y tinta.