¿Inacabado?
viernes 12 de diciembre de 2014, 03:37h
La era Franco duró 39 años, la socialista en Suecia 44 años y los socialistas de Sant Boi ya llevan 35 años: todos los períodos son sin pausa.
La era socialista sueca, con pacto anti-comunista, se cuestiona hoy hasta en la súper leída “Milenium”; y sus males no fueron la corrupción. De Franco, que tras Felipe II tuvo el gobierno más longevo, y que hoy solo Castro lo supera con creces. En cuanto a los socialistas santboianos, que con ayuda comunista como ahora , siguen en el poder sin el “stop” que permita la revisión de su gobernación municipal: ensombrecida por la debilidad crónica de sus cuentas públicas, la falta de inversión libre y el clientelismo subsidiado, y recordar que estuvo en la lista roja de Boyer-Solchaga, largos períodos -por gastar más que ingresar-, también la mediocridad urbanística que genera la recalificación fácil (AZKAR) y accidentes (Béisbol), nos pesa actualmente.
Añádase el lastre de Coressa y Claus, con sus “agujeros negros” y el “consejo de 50 yuppies súper pagados” al mando de la máquina municipal, para entender que si hay un Ayuntamiento que tenga todos los números para tener un cambio de rumbo brusco, es el nuestro. Todo cambia, todo se marchita, hasta la rosa sueca… ¿qué no será la rosa trepadora?
Son años con la misma cantinela, festejos y excusas. Un 17% de parados y hurgadores de contenedores, requieren que las ventanas del Ayuntamiento se abran a nuevos aires, a nuevas gentes aptas y preparadas. No bastan los folklores y las frases hechas, los despistes y los desvíos contables. Debe acabar la impunidad y si nuestro territorio esta acotado a la caza, deben ya salirse tras 35 años de poder indiscutido, los cazadores furtivos del coto municipal santboiano.
Sepan que cualquier auditoría convencional, bien hecha, revelará más deuda que la reconocida hasta ahora. Los que sigan, lo tendrán duro. Todos los finales de era son difíciles pero luego la verdad, alivia y facilita el buen gobierno. La campana santboiana necesita nuevo campanero.