La construcción de la autovía B-25 en Sant Boi, que comenzó en julio y durará 20 meses, permitirá mejorar la movilidad urbana y conectar directamente con la autopista C-32, evitando la congestión en la rotonda de La Parellada. La nueva vía también reordenará los accesos al casco urbano y abrirá nuevas conexiones. El proyecto, que ha sufrido varios retrasos a lo largo de los años, se espera que esté operativo en abril de 2025.