En Cornellà, una campaña municipal informa sobre la obligatoriedad de identificar perros con chip y ADN según la Ordenanza de Convivencia Ciudadana. Se han impuesto sanciones por incumplimiento, pero se permite reemplazarlas por trabajos comunitarios. El Ayuntamiento destina recursos a mantener trece parques caninos y cuatro 'correcanes', con dos más en construcción.