Las obras de reforma de la Avenida dels Banys de Castelldefels han comenzado su segunda fase de los trabajos, la cual comprende desde el Passeig Garbí hasta la calle del Carme. Según está previsto, hasta finales de septiembre se llevarán a cabo las actuaciones de demolición del pavimento existente, y se espera que la reforma total de la avenida termine durante el próximo mes de diciembre.
Además, estas obras afectarán a la movilidad de la zona a partir del 19 de septiembre, por lo que el Passeig Garbí se cortará al tráfico desde la calle 3; y el Passeig Marítim se cortará en dirección a Gavà, desde la Avenida de la Playa hasta la calle 3, algo que afectará a las líneas de bus y a las islas de contenedores de la zona. Por lo contrario, a partir de este mismo día el Passeig de la Marina volverá a estar abierto al tráfico.
Por otro lado, el Ayuntamiento de Castelldefels ha recordado que, pese a que de un principio estas obras planteaban una actuación de cuatro fases y una duración de 12 meses, finalmente se está llevando a cabo la propuesta planteada por la empresa constructora. Por tanto, estas actuaciones se llevarán a cabo en tan solo dos fases, y tendrán una duración total de casi siete meses, unos términos que el consistorio aceptó.
Por lo que respecta a la Fase uno, esta comenzó el pasado 19 de abril, y se puso en servicio oficialmente el pasado 6 de julio. Pese a ello, todavía hay detalles pendientes por terminar, entre los que se encuentran la señalización horizontal de la zona o la plantación de árboles, un trabajo que finalmente se hará durante la Fase dos.
Un proyecto que busca crear un eje cívico y familiar
A través de esta transformación, buscan convertir la Avenida dels Banys en una vía dinámica que cuente con una identidad propia y renovada, de forma que el objetivo principal de esta actuación es recuperar la actividad de restauración mediante un espacio para el paseo, nuevo mobiliario urbano y el soterramiento de los servicios.
Finalmente, dentro de este proyecto también están trabajando para lograr equilibrar los espacios entre las terrazas y las zonas de peatones. Y, además, también se encuentran mejorando el drenaje superficial y creando las mejores condiciones para que los árboles y arbustos puedan desarrollarse en todo su potencial.